La princesa Anneliese nació el 12 de diciembre de 1494, sí tan solo unos meses después de la llegada de su futuro amor.
El qué parecía ser un hermoso día en su gran Imperio, el Imperio Francés, pronto se convertiría en su martirio. Anne, cómo solían...
Anneliese despertaba con un inmenso dolor de cabeza, no sabía dónde se encontraba por lo qué al momento de querer levantarse sintió un mareo así qué decidió seguir acostada.
- Veo qué has despertado, princesita. - Un tártaro habló pasando la punta de su espada por su cuerpo.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
- ¿Qui-quienes s-son? - Preguntó cómo pudo la princesa.
- Ya te lo dijimos hermosa. - Se acercó hasta quedar frente a frente con la mujer, está se intentó alejar de el pero el hombre rápidamente la tomó de su barbilla lastimandola.
- Doruk dejala. - Otro de los tártaros llegó haciendo qué el hombre la soltará. - Ve y trae agua. - El hombre sin chistar salió del sótano de aquel barco.
- Por favor, llévenme a mí hogar. - Rogó la princesa recibiendo un asentimiento negativo del hombre.
- Debes saber qué ahora perteneces al Khan de Crimea, el elegirá qué hará contigo. - Mencionó con cierto enojo el tártaro.
- Soy la princesa Anneliese de Francia, no pertenezco a nadie. - Dijo con orgullo.
- Aquí solamente eres Anneliese, una esclava francesa. - Murmuró entre dientes haciendo qué la joven soltará unas lágrimas.
»»» 2 días después.
- Anneliese despertó tratando de respirar pues el hombre qué la ayudo de Doruk ha estado bromeando con ella y justo está mañana no se salvó de su travesura ya qué este le aventó un vaso de agua. - OYE! - Gritó una vez qué pudo respirar bien.
- Hemos llegado a Crimea, vamos levántate. - Dijo para empezar a caminar hasta la salida del sótano.
»»»
Una vez qué estuvieron frente al palacio de Crimea, Anneliese sintió miedo aquel lugar parecía abandonado la niebla no dejaba ver bien.
- Vamos entra ya. - Hablo uno de los tártaros empujandola para qué entrara más ella se rehusaba por el miedo.
- Se su-supone qué ustedes pertenecen al imperio otomano, ¿qué hacemos en Crimea? ¿y las demás chicas? ¿qué les hicieron? - No obtuvo ninguna respuesta más si un fuerte apretón en su brazo.
- Deja de hacer preguntas y camina. - El tártaro la soltó.
Sin chistar más, la joven princesa solo pudo seguir a aquel tártaro.
- Khan. - Dijo aquel tártaro cuándo estuvo ante la presencia de un hombre con varias mujeres a su alrededor, Anneliese solo pudo mirarlo con asco.
- Iskender viejo amigo, ¿qué me has traído el día de hoy, ah? - Preguntó una vez qué ordeno a las muchachas qué le estaban dando un mensaje parar.
- Está señorita es una princesa, la heredera de Francia, creí qué ella podría ayudarnos con el problema qué su hijo tiene con el príncipe Süleyman. - Dijo obteniendo una cara de enojo y sorpresa por parte del Khan.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
- ¿Me estás diciendo qué desición debo tomar? - Esté se acercó lentamente a Iskender más este no se inmutó.
- El príncipe Sahib es como mi hermano, ¿lo quiere ver muerto o lo quiere vivo? - Contraataco haciendo qué el Khan lo mirara con su ceño fruncido. - Usted más qué nadie sabe qué el sultán Selim no perdona a quien dañe a su hijo, a su único heredero.
Después de eso el Khan de Crimea decidió qué Anneliese fuera enviada como un regalo al príncipe Süleyman en Manisa por parte de su hijo.
Anneliese al llegar a Estambul fue recibida con desprecio por parte del sultán ya qué fue un regalo de Crimea, más está decidió qué debía sobrevivir como de lugar por lo qué entabló una conversación larga con el sultán (omitiendo qué es una princesa), este dándose cuenta qué era una simple mujer la cuál fue arrebatada cruelmente de su familia.
Anneliese llegaba al palacio de Manisa encontrándose con el príncipe, el cuál al instante quedó flechado por la mujer.
