BETA.

Capítulo.- 4

Capítulo. - 4

Asami soltó a su presa dejando caer con cuidado aquel joven castaño que se encontraba inconsciente o semi muerto entre sus brazos.

Entre la oscuridad se podía ver muchas cosas raras acumuladas alrededor formando un círculo en el suelo. Asami se acercó para revisar aquel joven quien besa y acaricia cada vez que revisaba el cuerpo desnudo del joven Beta.

- ¡estas con vida, me alegro!

Asami seguía curando el cuerpo de Misaki, cada marca de mordida que tenía en el cuerpo la curaba pasando su lengua, su saliva al instante la herida se cicatriza con rapidez. Al ver eso Asami soltaba pequeñas risitas se alegraba de ver que su hembra era de buena calidad. No se había equivocado en tomar aquel joven Beta para aparearse.

A las afueras de los suburbios, en una pequeña y acogedora casa, iluminada por un pequeño faro que se encontraba en el porche de la entrada de la pequeña casita, se encontraba tocando con tanta fuerza y desasosiego la puerta de madera un joven de complexión robusta, cabello rubio y ojos azules, en su mirada se podía ver la desesperación que sentía por saber que su alfa estaba a punto de emparejarse y precisamente no era con él.

Aunque gritara lo más fuerte que su garganta le permitía sus gritos y sus golpes no eran suficientemente fuertes para detener aquel desafortunado evento que se estaba llevando a cabo a dentro de aquella pequeña casita.

Afuera  la puerta seguía siendo tocada con gran insistencia y desesperación tratando de evitar que Asami se aparee con aquel joven.

Era inevitable Asami se encontraba en su pleno Rut concentrado haciendo el amor a su hembra.

El placer que sentía al estar dentro del interior de su hembra lo enloquecía cada vez más su celo aumentaba haciéndolo perder por completo la razón. Pasaba las manos acariciando cada rincón de ese delgado y bronceado cuerpo. Con ternura y delicadeza acaricia el rostro resplandeciente de su hembra, no podía dejar de lamer el cuello de Misaki ya que el aroma que desprendía era tranquilizador y reconfortante para aquel alfa enloquecido y ciego de deseo y lujuria por su hembra.

-¡eres tan hermoso que no pienso dejarte ir nunca!

Seguía embistiendo aquel pequeño Beta que lo hacía perderse en un sinfín de sentimientos que revolcaban con el vaivén de las olas.

Al sentir como llenaba aquel vientre de su semen tomó aquel joven inconsciente entre sus brazos sujetándolo con fuerza y penetrando lo más profundo realizando el vínculo para no ser separados.

-por fin eres mío, solo mío Misaki.

Asami volvió a morder el cuello del inconsciente Misaki, que en ningún momento reaccionó para saber qué estaba pasando con él. Ya que su cuerpo y su mente estaban en completo fuera de sí, el dolor que siente era enorme jamás había tenido esa clase de dolor ni cuando se estrelló con la bicicleta contra el árbol.

La mente de Misaki comenzó a reaccionar al momento de sentir algo muy caliente que provenía de su vientre, ese calor hizo que el cuerpo de Misaki comenzará a hervir por una extraña sensación. Era un calor que lo estaba asfixiando, tenía tantas ganas de tomar una bocanada de aire para poder respirar y apagar ese fuego.

Abrió la boca y lentamente comenzó a hiperventilar el aire. Sus pulmones comenzaron a llenarse de oxígeno lentamente su cuerpo se empezó a enfriar. El latido de su corazón se escuchaba de nuevo, por un lado, respiro tranquilo al saber que seguía vivo por el otro algo le atemorizaba y no sabía que era.

Sus oídos se percataron de un ruido medio extraño, era una voz profunda y seductora la cual producía unos gemidos extraños, podría estar alucinando.

Se acordó cuando un día llegó a su casa y encontró a su hermano Takahiro teniendo sexo con Usagi en la sala de su casa, los ruidos que hacían sus bocas, eran gemidos de placer. Salió corriendo por vergüenza después de ver eso.

Acaso esta Usagi y Takahiro teniendo sexo enfrente de él mientras está inconsciente, en verdad ese par no tenía sentido de responsabilidad y sobre todo no lo estaban respetando, como era posible que se estuvieran apareando cuando él se encontraba presente, aunque se encontrara inconsciente pero no era justo para él ya que los podía escuchar con tanta claridad que su compañerito se le había puesto duro de solo escucharlos.

¡son unos descarados sinvergüenzas!

Mientras maldecía e insultaba a Usagi y a Takahiro, sus párpados comenzaron abrirse lentamente. No podía reconocer la cara de la persona que le estaba hablando, el rostro, aunque lo tenía pegado al suyo no distinguía nada ya que estaba borrosa su visión. Cerro de nuevo sus ojos y se quedó dormido.

-Misaki, Misaki.

-ngn.

Asami colocó con cuidado el cuerpo de Misaki en la cama si a eso se le podía llamar cama ya que había un montón de cosas encima de ella. Tomó una manta y se la colocó encima de su cuerpo desnudo.

Asami tomo un poco de agua y algo de comida tenía hambre, ya que se sentí un poco exhausto y con mucho apetito; en todo momento veía hacia la dirección en donde se encontraba Misaki acostado. Su mirada era tan penetrante que Misaki, aunque se encontraba durmiendo profundamente podía sentir como lo estaba taladrando esa persistente mirada. Su cuerpo se estremecía.

****Gracias por leer esta pequeña historia.****