Capítulo. 23

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Asami cargo a su pequeño Beta y entraron a una habitación vacía, donde se acomodaron en la camilla para seguir con el fuego ardiente de la pasión.

Ngh... aahh... los gemidos eran suaves y placenteros para el alfa quien acaba de entrar en un celo descontrolado.

Ya tiene que no ha podido tener intimidad con su beta ya que han tenido todo el tiempo ocupado en ir y venir de un lado a otro.

- ¡Aaaahhh! Un grito salió de la seca garganta de Misaki quien fue mordido por el hambriento alfa de Asami quien acaba de anudar con su Beta.

¡Cuánto tiempo pasaron encerrados en la habitación! quien sabe, pues bien, el pobre de Misaki no puede caminar bien ya que su cadera le duele mucho y no precisamente es por satisfacer al bruto y desesperado alfa de Asami.

Si no que se cayó de la camilla a la hora de tratar de levantarse ya que sus necesidades biológicas lo estaban llamando.

Tenía que ir al baño no se fijó que su cuerpo estaba en el filo de la angosta camilla cuando giro y cayó cuan largo; lastimándose la cadera y la espalda.

Ahora tendrá que permanecer en una camilla por unos cuantos días acompañando a los niños y a su hermano en el hospital.


Takahiro despertó del largo y profundo sueño en el que se encontraba, Akihiko revivió al ver a su amado despierto.

-Takahiro ¿cómo te sientes? Preocupado Akihiko sostiene su mano teme lo peor.

-U-Usagi... Lenta y pausadamente habló, su garganta le ardía la tiene muy reseca no puede ni pasar saliva.

Akihiko tomo rápido un vaso con agua y se la dio a beber con cuidado. El doctor entró para revisarlo.

A simple vista se encuentra bien Takahiro realizarán más estudios para descartar efectos secundarios.


El nuevo integrante de la familia Usami lo cuida su hermano mayor Sayuri quien le da de comer cada hora que le toca. Cambiarle el pañal no porque no tiene un brazo bien.

Eso le toca a su padre Byacuya, quien los cuida con amor y paciencia mientras sus padres Takahiro y Akihiko salen del hospital.

Cuando no puede cuidar a Sayuri y al pequeño Usagi, le toca a su tío a Asami y Misaki cuidar de ellos.

Eso le gusta más a Sayuri porque pasa tiempo con Yuki quien lo reprende cuando tira a su hermanito al suelo.

No lo tira intencional el pequeño Usagi se mueve mucho y se resbala de sus manos cayendo suavemente en la esponja que les compraron sus tíos para evitar accidentes mayores.

-Sayuri te amo, ¡no por el hecho que tengas un hermano menor te voy a dejar de querer y de cuidarte!

Yuki le dijo sus sentimientos a Sayuri ya que lo ve un poco triste estos últimos días que han convivido juntos.

-Yuki quiero casarme contigo cuando seamos grandes...

Yuki se quedó en shock por la declaración tan repentina de Sayuri. Tan solo tienen cuatro o cinco años de edad y este niño es tan impaciente, él quiere seguir disfrutando de su infancia.

-Yuki, no estoy urgido por crecer... bueno solo un poco ya que mis padres tienen a mi hermanito yo ya estoy grande así que debo ser independiente.

Yuki entiende las palabras de Sayuri se acercó y lo toma de los hombros.

-querido Sayuri, amado hermano. No crezcas tan rápido porque entonces tu padre Byacuya no te podrá disfrutar mientras eres aun un niño pequeño. Deja que te disfrute y que te quiera. Deja que recupere lo que perdió por una mala persona.

Por favor no crezcas aun, mantente asi, y crece paso a paso toma mi mano para que no me dejes...

Sayuri entiende las palabras de Yuki, sus ojos brillan al sentir un beso en su frente que su hermano Yuki le dio.

El pequeño Usagi balbucea y aplaude con sus diminutas manitas ya que se encuentra presente en esa charla que tuvieron sus hermanos mayores.


Ya pasaron tres meses desde que Takahiro reaccionó; su recuperación ha ido mejorando con el tiempo.

Misaki no se siente bien últimamente ha estado vomitando por la nauseas que le dan y falta de energía para moverse, para salir de las dudas fue al hospital.

-¡Felicidades Misaki!, tienes tres meses de embarazo...

Misaki sintió que el mundo se le vino encima. Embarazado de tres meses como es posible si él sea estado cuidando ya que su cuerpo no puede procrear de nuevo. ¡Es beta, imposible!

Después de que el doctor realizará otros estudios para tener mejor control del embarazo porque es beta, salió impresionado del hospital llevando una sola idea en la cabeza y esa era: entrar a una librería para comprar más libros que hablen sobre betas que son mordidos por estúpidos, fornidos, caprichosos, elegantes y sabrosos alfas.

Al salir de la librería no estaba muy seguro si en comprar solo un libro o varios, pero cada uno habla de diferentes temas así que sus delgados brazos apenas si pueden con las bolsas con los libros que compro.

Al llegar a casa miro a los niños jugar tranquilamente.

En la cena Asami mira a Misaki, se le hace extraño que este comiendo más de lo normal. además, él sea sentido extraño hace tiempo.

-ngn... Ryuichi... aahh... más lento... aaahhh...

-no puedo estoy en celo... ngn...

Asami embiste con cuidado a Misaki ya que sintió algo moverse en su vientre, mirando el pálido rostro de Misaki... ese brillo en sus ojos verdes...

Sus labios dibujan una sonrisa. Al terminar su celo coloco su mano en el vientre de Misaki quien está profundamente durmiendo.

-Mamá, ¿no estás más gordo hoy?

-si no comes no crecerás Yuki, así que come o me lo comeré yo.

Yuki tomo rápido el bollo relleno junto a sus zanahorias, solo mira desconcertado a su madre quien tiene un apetito voraz. 




****Gracias por leer esta pequeña historia.****

BETA.Where stories live. Discover now