Stay With Me [JongTae]

Capítulo XXV. Reflection.

I’ll be the bad guy now
[Ahora seré el malo]
But no, I ain’t too proud
[Pero no, no estoy muy orgulloso]
I couldn’t be there
[No pude estar allí]
Even when I tried
[Incluso cuando lo intenté]

Seasons changed and our love went cold
[Las estaciones cambiaron y nuestro amor se enfrió]
I’m waiting on you again, so I don’t take the blame
[Te estoy esperando otra vez, así no me culpare]

I got a feeling that it’s time to let go, I say so
[Tengo un presentimiento de que es tiempo de dejarlo ir, lo dije]
I knew that this was doomed from the get-go
[Supe que esto fracasaría desde el principio]

Maybe you don’t understand what I’m going through
[Tal vez no entiendas por lo que estoy pasando]
It’s only me
[Solo soy yo]
Run away, but we’re running in circles
[Huimos, pero estamos corriendo en círculos]
Run away, run away, run away
[Huimos, huimos, huimos]

Post Malone — Circles

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Cuando Nichkhun se estacionó frente al único motel existente en kilómetros a la redonda, en aquel tramo de la autopista central que el bendito GPS de su móvil indicaba como su destino final. Dudó de forma momentánea si de verdad se encontraba en el lugar correcto.

Sin embargo, teniendo en mente que el mensaje de texto con la dirección de aquel lugar, era la primera señal de vida que su amigo había dado en varias semanas. No tuvo de otra, más que confiar en que esté, siguiera ahí y aventurarse.

Por lo que, inmediatamente, marcó el número móvil del moreno esperando que se tomará la molestia de atender su llamada y que dejará de una vez por todas de ignorar sus intentos por comunicarse con él, de una vez por todas.

Para su suerte no tuvo que esperar demasiado para obtener respuesta y al tercer timbrazo, la respiración de MinHo inundó por completo la línea haciéndole saber al tailandés que por fin, había alguien escuchándolo del otro lado del aparato.

—MinHo. Por Dios, esta vez si que te has pasado— momentáneamente la calma volvió a su sistema y sintió el cuerpo muchísimo más ligero que en los últimos días —¿Pero qué mierda te pasa por la cabeza?— le reprochó al instante, sin dejar pasar por alto la oportunidad de hablar primero.

Sabía que de no hacerlo, quizá no iba a tener otra oportunidad para ello en las próximas horas.

Habían sido dos semanas frustrantes y caóticas. Estresantes. Mucho. Esta vez, no había sido para nada, muy poco el tiempo que MinHo se había esfumado de la faz de la Tierra sin dejar rastro alguno y Nichkhun tenía que admitir que, se había pensado lo peor. Porque para ese punto, ya no sabía que esperarse del moreno.

Incluso se había imaginando más de mil escenarios, todos catastróficos. Unos más que otros y pensado, en acudir con Choi DongWook para que le ayudara a buscarlo, porque todos sus intentos habían sido totalmente en vano.

Por suerte no lo había hecho y el padre de MinHo se había encontrado tan ocupado con su gran postulación, como para interesarse por saber cual era el paradero exacto de su hijo o de lo contrario, Nichkhun estaba seguro de que no solo la vida de su amigo, habría llegado a su final hacia varios días atrás. Sino la suya también.

Un gran bostezo le hizo saber que el moreno debía de estar despertando apenas en ese momento y que, muy probablemente no le había prestado atención a su enérgico regaño. Como siempre.