Todo comenzó como un juego de hermanos pequeño, pero acabo en un país totalmente diferente, estos hermanos deben atravesar grandes obstáculos y llevarse algunos con ellos. Marianela Listing junto a su hermano Nicolás, descubren lo que es vivir en un...
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No hay manera que pueda explicarles lo que fue estar sobre el escenario. Los primeros segundos no podíamos creer la cantidad de personas que habían gritando, llevando carteles a nuestro nombre y alborotados por vernos, fue increíble y más de una lágrima salieron de mis ojos. Pude salir del shock una vez que la música empezó, mire a Nico quien miraba hacia al público igual de abrumado que yo.
Al conectar nuestras miradas sonreímos cayendo de una vez en donde estábamos parados, entonces empezó con las notas y la gente comenzó a gritar, sonreí sintiendo la adrenalina pasar por cada parte de mi cuerpo. La sensación era tan placentera, así que hice lo único que todos buscaban, que cantara.
Sali del escenario con una gran sonrisa, pero esta vez estalle en lágrimas de felicidad, tape mi cara previniendo que las cámaras captaran mi imagen y en el camino a la salida recibí la ayuda de Nico. Me rodeo con sus brazos y reposo sus labios en mi frente, al estar en contacto sentí como su cuerpo temblaba al igual que el mío. Compartíamos la misma desesperación.
Y así nos quedamos, abrazados el uno al otro esperando con ansias la presentación de nuestros amigos, fuimos directo a ellos e estos nos esperaban frente a las pantallas que reproducían todo lo que sucedía en el show al aire libre. Pude alcanzar a ver sus sonrisa entre tanta gente. Los primeros brazos que me recibieron fueron los de mis primo, no pude evitar abrazarlo con tanta fuerza, cerré mis ojos sintiendo sus manos acariciándome cuidadosamente mi espalda y cabeza mientras este y sus amigos parloteaban de lo bien que lo habíamos hecho.
Los próximos segundos intente analizar la locura que fue cantar en frente de toda esa multitud y a la vez quería escuchar lo que mis amigos hablaban con emoción.
-Es que men, todavía no caigo -hablé compartiendo mi experiencia y todos callaron- o sea ¿Ustedes entienden que toda esa gente que está ahí cantaba con nosotros? -cuestioné luego de apuntar a dirección de las personas con los ojos aún cristalizados, ellos me vieron sin darme ninguna respuesta más que sus sonrisas y enseguida me tape la cara tirándome para atrás, los brazos de Bill me atraparon por detrás y al notar que era el, me recosté en su pecho.
-Tranca Mar. Tomate un clona. -Dijo mi hermano y solo yo reí, pues los demás no entendían-¿Cuando salen?
En lo que escuchaba la conversación de Nico y los demás mis manos fueron tomadas por las de Bill e este las acaricio para que dejaran de temblar, lo mire a los ojos y en cuanto lo hice dejo de ver mis manos para verme a mí con una sonrisa.
Fue rarísimo, porque te juro que esa mirada era la misma que Tom usaba para provocar a sus minitas, y claro, como no compararlos, si son gemelos.
En cuestión de minutos los chicos entraron al escenario y mi hermano y yo, esperamos tranquilamente en el buffet, no habíamos comido nada en la mañana así que estábamos muertos de hambre, mientras tanto veíamos en el monitor la transmisión en vivo de los chicos. Sus canciones fueron hermosas y la voz de Bill se escuchaba mucho mejor que de las veces que lo escuche en sus ensayos, una voz muy hermosa de escuchar.
