Todo comenzó como un juego de hermanos pequeño, pero acabo en un país totalmente diferente, estos hermanos deben atravesar grandes obstáculos y llevarse algunos con ellos. Marianela Listing junto a su hermano Nicolás, descubren lo que es vivir en un...
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¿Pedir?
Quisiera pedir paz mental.
Me estaba bancando toda la mierda que el entrevistador me tiraba, hoy como nunca todos los programas se pusieron de acuerdo para tirarme basura y ya no aguantaba el nudo en la garganta. A pesar de haber dejado en claro todo tipo de mal entendido ellos insistían en que confirmara cada rumor sobre mí, mire a Nico con nervios y como una nena chiquita buscaba la ayuda de mi hermano para las cagadas de pedo de mi vieja.
Él reposo su mano sobre mi pierna en señal de apoyo y yo con tal solo sentir su tacto sentía que estaba a nada de quebrar frente a la cámara y el público. Tape mi boca en lo que suspiraba y rezaba a dios con que los ojos no se me notaran llorosos, por debajo de la mesa sentí las caricias en mi pierna.
-No quiero crear una mala imagen de ti, pero nos interesaría saber sobre tu adicción a los cigarrillos, los paparazis han tomado algunas fotos de ti el día de la fiesta y en otras ocasiones. Dime, ¿esa eres tú? -en las pantallas del programa justo detrás nuestro enseñaron fotos donde comprobaban que era yo en aquella fiesta y también el día en el que fume en la calle a escondidas, Nico estaba a punto de saltar cuando note que este apretó mi pierna con fuerza y tenso su mandíbula, debía de intervenir.
-Contra dice sus palabras -comencé con un poco de nervios, pero manteniéndome seria- crea una mala imagen de mí y adjuntas pruebas sobre ello, creo que como entrevistador debería saber manejar su programa, porque todo el mundo lo ve cada mañana y saber que un profesional como usted habla de esa manera con sus invitados, y además una menor, puede causar una gran mala impresión a sus espectadores. Tal vez sea una imagen pública, pero eso no me obliga a compartir toda mi vida con ustedes y tampoco les da el derecho de irrumpir en ella.
El entrevistador calló por un momento, pero luego de verlo tan nervioso comenzó a reír, Nico y yo nos mantuvimos callados sin expresión alguna.
-Ya veo, la pubertad los vuelve tan rebeldes y mal educados -miró con una sonrisa hacia el público que reía, había ignorado por completo mi mirada, por lo que suspire mirando hacía bajo y reí con él.
Limpie mis dientes con mi lengua en lo que reía por lo bajo, había aguantado todo el día tantos comentarios de mierda que necesitaba descargarme de alguna forma.
-Veo que tiene demasiada experiencia en ello -hable viéndolo con una sonrisa- No quisiera saber cómo es tener a sus hijos -reí con sarcasmo fingiendo entendimiento e éste sonrío muy natural- Que tortura será convivir con usted, compadezco a sus hijos.
Ya no tenía filtro, me re había podrido de esta gente de mierda, así que me saque la careta y fui con todo, Nico a mi lado me dio un par de golpees en mi pierna en lo que yo intimidaba al entrevistador, pero este parecía seguir con su papel de hijo de re mil puta.
-Bueno, no has dejado muy claro tu gran potencial -subió sus cejas y por lo que vi estaba nervioso arreglando sus papeles totalmente organizados, solté una risa por su comportamiento- Mar, ya que al fin hablas en todo el programa
