Capítulo Cincuenta y Cinco

112K 13K 9.8K
                                    


Capítulo cincuenta y cinco.


De verdad lo estoy intentando, pero es como un imán, por lo que mis ojos vuelven a ella una y otra vez.

Ella sabe que la estoy mirando, lo que casi me hace sonreír mientras sostengo mi trago.

—Entonces, miramos a Leslie —Me dice Harry deteniéndose a mi lado.

—La miramos —concuerdo.

—Y no hacemos nada.

—¿Quién dice que no estoy haciendo nada? Mirarla es hacer algo, ella sabe que lo estoy haciendo y le gusta —Le hago saber.

—Muy presuntuoso.

—No. Ella sonríe y me mira de reojo para comprobar si aún lo hago o si la atrapo, tal vez es su tipo de juego previo.

Ante mis palabras Harry se ahoga con su bebida y volteo a verlo arqueando una ceja.

Puede que aún me vea fatal, mis ojeras reflejan mis pésimas horas de sueño y mi preocupación por mis padres, pero espero mi mirada transmita lo exagerada que me parece su reacción.

—¿Qué carajos, Andrew? —pregunta cuando logra recuperarse y sonrío.

—No actúes como si fuese tímido y no estuvieses familiarizados con los juegos previos. El sexo no tiene que avergonzarte, Harry.

—Eres una mierda —Se ríe—, pero estoy feliz de escucharte ser una mierda... Odio verte triste.

Me mira fijamente y trago.

No estoy al cien por ciento sintiéndome yo mismo de nuevo, tengo muchas responsabilidades sobre mis hombros. En este momento mi enfoque está en el duelo de mis padres, especialmente de papá que es una sombra de quién solía ser y genuinamente no puedo imaginar cómo se siente, perdí a mi hermana, pero él perdió a su hija, se la arrebataron.

Sin embargo, entenderlo no hace inevitable que me frustre, que en ocasiones me resienta antes de sentir culpa, porque estar para él ha significado guardarme lo que siento para después, no puedo llorar a mi hermana como necesito ni vivir su duelo, porque él me necesita, soy quien lo sostiene, siento que todo está contenido dentro de mí y hace que me duela aun más.

Los meses han pasado, pero todo se siente tan crudo y reciente, a veces solo espero que me llame o aparezca en mi apartamento siendo una molesta sabelotodo bajo el argumento de "soy la hermana mayor". Pero pese al dolor, hay algo que también he aprendido tras la partida abrupta y dolorosa de mi hermana: somos instantes que un día terminan, depende de mí hacer que esos instantes importen y sean bien vividos.

Se vale odiar la perdida, sufrirla y resentirla, pero no está permitido no levantarse e intentar hacerlo mejor. Me duele porque estoy vivo y porque estoy vivo debo hacer que mi vida tenga algún tipo de sentido, propósitos, experiencias y vivencias. No creo en el destino, considero que las decisiones y elecciones que hago forjan mi camino y he decidido que, con mi pérdida y mi dolor, también quiero ser feliz.

—Y quiero a Leslie —finalizo en voz alta mis pensamientos.

—De acuerdo, creo que todos lo sabemos —Me hace saber Harry.

—Estaba teniendo pensamientos y luego hablé en voz alta para mí.

—No seas grosero —finge sentirse mal y ruedo los ojos—. Entonces, quieres a Leslie ¿Y qué pasa? ¿Solo la mirarás? No eres el lento de grupo, ese es Doug.

La inspiración de Andrew  (BG.5 libro #5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora