Un poco común triángulo amoroso ♡ vhopekook ❀ omegaverse

CAPÍTULO OCHO: DUDAS

Después de la tercera clase, JungKook supuso que TaeHyung no iba a llegar ese miércoles y regresó a casa con un sentimiento amargo creciendo en su pecho, así como el jueves cuando tampoco se apareció. Sabía que eso se debía a la conexión inequívoca que tenía el alfa rubio con HoSeok, su omega destinado, pero estaba comenzando a plantearse la idea de que la ausencia del propio alfa con aroma a libros también afectaba a su lobo de manera negativa por el mero hecho de ser él y de haber dejado una cuestión pendiente entre ambos que debían resolver, aunque no estaba claro de lo que era.

Así mismo, tenía que lidiar con la idea del estúpido trabajo que tenían que entregar ese viernes relacionado al proyecto y al no haber hablado con el otro sobre el tema, no tenía idea de cuál iba a ser el desenlace del mismo, ¿quizás hablarían con la profesora para pedir unirse a otro grupo? Cuando escapó de la cafetería sólo tenían un borrador de la entrega y él se había encargado de terminarlo simplemente para no llegar con las manos vacías.

Al menos era el último día de la semana.

Esa mañana también se encontró con YoonGi, su vecino teñido de verde. El alfa con aroma a menta lucía más cansado que el miércoles que se lo encontró, pero no perdía aquel swing relajado y casi adormilado que JungKook había notado en él; moviéndose como si su cuerpo pesara, pero con estilo.

Le agradaba.

—Buenos días —saludó sobre el lado contrario del ascensor.

—Buenos días, vecino contador —arrastró las palabras un poco, sonriendo ladino.

Sonrió un poco por el apodo.

—Nunca me dijo en qué carrera estaba, por cierto —le dijo al hombre que reposaba sobre una de las paredes del reducido espacio y este pareció darse cuenta de eso, porque largó un jadeo medio dramático y colocó una mano sobre su pecho.

—Cierto —señaló con una pequeña mueca de pena—. Estudio animación, "cine de animación y postproducción", para ser más específicos —hizo comillas con sus dedos y JungKook lo observó con interés, no estaba seguro de haber escuchado el nombre de esa carrera antes.

—¿Cine de animación? —preguntó curioso y YoonGi asintió—. Animación así como... ¿Disney?

—Ding, ding, ding —movió su dedo y lo miró, dejando caer su cabeza hacia delante—. Bueno, mis historias son más oscuras que las de Disney —hizo un ademán con su mano—, pero es un excelente ejemplo.

—Debe ser una carrera genial... —dijo con un poco de entusiasmo en su voz a la par que las puertas del ascensor se abrían en la planta baja—. Aunque parece ser bastante agotadora —agregó, mirándolo de pies a cabeza con una ceja alzada y YoonGi pareció darse cuenta del tono del contrario, porque largó una risa ronca.

—Oh, no —negó con la cabeza—. Lo que ves aquí es alguien que aún no procesa que acaba de comenzar su segundo año y que debe despertar temprano otra vez, sólo eso —se señaló a sí mismo y Jeon hizo un sonido de entendimiento—. Aparte de eso, mi carrera me encanta —sonrió suave, caminando hacia la salida a la par de JungKook quien ahora lucía como un niño descubriendo los dulces—. A veces la universidad hace eventos de pase libre, puedes ir si quieres —se encogió rápidamente de hombros.

—¿En serio? Gracias —sonrió emocionado y YoonGi enarcó una ceja, divertido y algo enternecido por las expresiones de JungKook y su emoción por una carrera que no se acercaba a la propia—. Estaría encantado de... ¡Oh! ¿Qué edad tiene? Quiero saber si lo puedo tutear —preguntó.

Para ese punto, ambos se encontraban frente al edificio y sus caminos tenían que separarse. YoonGi entró en cuenta de que él tampoco había preguntado la edad del muchacho y se dio un golpecito en la frente con su mano que hizo reír a JungKook.