⩩🕷️| 𝙏𝙖𝙧𝙖𝙣𝙩𝙪𝙡𝙖 {𝐇𝐎𝐁𝐈𝐄 𝐁𝐑𝐎𝐖𝐍}

⩩ 23. 𝙄𝙣𝙛𝙞𝙚𝙧𝙣𝙤

"Es casi que demasiado
para únicamente mi alma."

Los rayos de sol se asoman por la ventana de cristal, despertándome debido a que la cortina no estaba impidiendo que entrara. Mis brazos están entrelazados a los del moreno, quien me abraza con fuerza y su respiración tosca y calmada me aturde. Miro que tiene sus ojos ligeramente inflamados y que está despierto. ¿No ha dormido nada? Mi respiración empieza a ir al mismo ritmo que la suya y al percatarse que me he despertado, alza su rostro para poder verme. Por lo marcadas que están sus ojeras puedo intuir que no ha dormido nada. Me acomodo despacio en la cama para poder abrazarle de forma más cómodos y he depositado una gran cantidad de besos en su rostro, a lo que el moreno me responde con una débil sonrisa.

— Hobie... ¿Qué quieres hacer hoy? — le pregunta mientras paseo mis dedos por su espalda

— ¿Sinceramente? ... Quiero dejar de estar en esta cama.. — Me susurra en un tono cansado, a lo que le he sonreído.

— Eso es un avance.. ¿Quieres salir o prefieres que nos quedemos en la sala?

Ha habido un silencio profundo, en el que el moreno no sabía realmente que responderme y yo solo me limitaba a acariciar su nuca despacio. Sus brazos me apretaron contra su cuerpo y puedo sentir como un poco del aire se expulsa por la presión que ejerce contra mi cuerpo. Me cuesta un poco el respirar por su agarre, sin embargo, no quiero que me suelte o que me deje ir por ello, así que empiezo a respirar más lento para mantener el oxígeno. Su cabeza se entierra en mi pecho y solo puedo sentir como se limpia un par de lagrimas frotándose contra este.

— ¿Podemos... comer algo y ver una película hoy? Algo sencillo, no quiero pensar demasiado. — Me ha dicho el moreno. Le respondo con una risa suave.

—Claro que podemos. Te cocinaré algo, está bien?— El moreno me ha soltado despacio y me he levantado de la cama.

Miro el reloj en silencio, ya es casi medio día. Miro por una última vez al moreno antes de salir de la habitación; el como abraza en silencio su almohada y mira hacia la nada. Al salir de la habitación y lavarme los dientes, me dirijo hasta la sala, donde enciendo el televisor y busco en alguna de las aplicaciones que tiene descargadas de forma muy dudosa alguna que sea de música. He puesto algo de fondo por mientras me voy preparando, haciéndome una coleta baja en el cabello y lavándome las manos. Por la hora, no vale de nada que haga un desayuno elaborado para los dos, más considerando que Hobie no está comiendo bien. He hecho unas tostadas para mí y para el moreno, he mezclado un mejunje de frutas y arándanos en un plato hondo y he agregado nueces en este. He aprendido a usar una cafetera que no use café instantáneo en mi estadía aquí; por lo que he hecho café para mí y para el moreno.

Escucho un trasteo entre las puertas por lo que asumo que el moreno ha salido de la habitación y ha ido directamente al baño. Caliento algo de leche en silencio, buscando alguna actividad que hacer para poder animar al chico. Suspiro en el silencio profundo y me llevo una mano a el puente de mi nariz.

Me siento totalmente atrapada. No sé qué hacer.

Cierro los ojos por un momento y siento como unas manos frías y sutilmente húmedas recorren mi cintura desde la espalda. Se posiciona a ambos laterales y siento los labios del moreno en mi nuca, besándome con cuidado, con algo de ternura y timidez. Luego, ha reposado su cabeza sobre la mía y ha suspirado.

— Gracias, Tarántula.. —Me susurra y siento como poco a poco la tensión en mis músculos se va relajando. He volteado a verle y he tomado su rostro entre mis manos.