VENDIDA

2O

— Amor, ¿que te gustaría hacer? Tengo libre este día.

— No lo se, solo quedémonos en casa.

— No, pero quiero salir contigo, pasear.

— Pues solo salgamos y ya, sin ningún plan.

— Bien, entonces vallamos a arreglarnos.

Nos fuimos a la habitación, nos bañamos juntos, y la verdad es que jugamos un poco con nuestras intimidades, aún no hacemos el amor, pero cada que me toca y me hace venir, quiero que me haga suya.

Salimos de bañar y nos cambiamos, yo me puse un vestido de tirantes floreado, perfecto para el verano, junto a unas sandalias blancas.

Salimos de casa y para irnos al auto, esta vez conduje yo, me metí a clases de manejo y ya tenía mi licencia, así que ahora podía llevar a Nam a cualquier lugar, ya que él no maneja.

Primero fuimos a un café, ya que no desayunamos nada, bajamos del coche y entramos a una famosa cafetería de Seúl.

Me tomó de la mano y dejó un beso en ella, pedimos nuestras bebidas y nos sentamos un momento ahí.

— ¿Tn? —alguien me llamaba.

Aa Jungkook, hola —me paré y le di un abrazo— ¿Cómo estás?

— Hola Namjoon, pues estoy bien,  al fin me mudé a Seúl, el lunes entro a una escuela de arte.

— Que bien, ¿y donde vives?

— En el edificio donde vive Jimin, él me consiguió un departamento, Jisoo me comentó que estás con Nam, me alegra por ti.

— Gracias. —sonreí.

— Me dio mucho gusto verte, cuídate.

— Claro, igual tú —le di otro abrazo y lo vi irse.

Nam me miraba seriamente, sé que está celoso, y recuerda el beso que Jungkook y yo nos dimos aquella vez.

— Solo me gustas tu.

— Lo sé, pero al verlo me acordé de que él te besó primero.

— Ya celoso, pero ahora tu me tienes a tu lado, ahora tu eres el que duerme en mi cama.

— Me vuelves loco Tn. Muero por hacerte el amor —susurró lo último.

— Yo estoy esperando a que lo hagas.

— Lo haré, pero todo con calma, quiero que sea especial para ti.

Salimos del café y nos sentamos en una blanquita, bueno solo él, yo le tomé una foto, y se veía exquisitamente bien.

Fuimos a dar una vuelva a la plaza que estaba frente a la cafetería. Había una fuente de esas que salen del suelo, muchos niños se estaban mojando.

Me causo gracia por qué los niños se reían cuando salía el chorro de agua, uno puso una cachucha en el suelo y cuando salió el agua, la cachucha voló y ellos reían.

Se veían tan tiernos.

— ¿En algún futuro te ves con un hijo mío?

— Si, deseo ser madre y que tú seas el papá.

— También deseó un hijo tuyo mi amor, lo deseo tanto.

— Hagámoslos, por favor. — dije en un susurro.

— Solo espera un poco, ¿si?, quiero que tu primera vez sea especial.

— Pero ¿lo haremos en aquel cuarto?

— ¿Quieres que sea ahí?

— No lo sé, lo dejaré a tu criterio.

— Bien, vámonos.

Me volvió a tomar de la mano y caminamos por el parque, veía todo a mi alrededor y tomaba fotos, todo aquí era muy lindo.

Un poco más tarde, al rededor de dos horas, nos dió hambre y nos fuimos a comer, quería prívese el tteokbokki y Nam me llevó a su lugar favorito.

— Es delicioso. —dije.

— Siempre que salía de la universidad, mis amigos y yo veníamos aquí.

— Cuéntame más de tu vida de adolescente, ¿tuviste novias?

— Solo una, en la prepa, con ella duré cuatro años, pensé que me iba a casar pero se fue lejos y supe que hizo su vida después de la universidad, la verdad me da gusto.

— ¿Y con ella perdiste la virginidad?

— Si, ¿y tú? ¿Tuviste novio?

— Si, igual uno en la prepa, pero solo duramos medio año, como que a esa edad de los dieciocho no tomas enserio las relaciones, quieres tener uno novio o novia y luego otro y así.

— Es bueno experimentar, pero con precaución.

— En mi caso solo fueron besos, nunca hice nada.

— Lo sé cariño..

Estar con Namjoon y conocer un poco más de él y qué sepa más de mi, es una manera de reforzar nuestro amor y nuestra confianza.

Él es un gran hombre y me tiene locamente enamorada.

Fuimos a visitar a Siwon y luego a ShinDong, conocí a sus hijos y son preciosos. Nos dio la noticia que será papá nuevamente por tercera vez. Claro que le dije que quería ser la madrina y ambos dijeron que si.

— Vamos a otro lugar, te va a gustar.

Me dio la dirección y fuimos otro lugar igual de precioso, pero era como un sendero, con un río que del puente salían luces. Ahora se que es el río Han, tomé mucha fotos, era hermoso.

Seúl me sorprende cada vez más.

Estuvimos una hora y nos fuimos a casa, estando ahí nos dimos otro baño y a la cama.