Competitive Lovers {Oliver Wood}

Episodio 53

Me desperté por el rayo de luz que trascendía de la ventana de la habitación de Ginny, donde dormíamos Hermione y yo. Era sábado, se preguntaran ¿Qué pasa un sábado?, Pues, casi nada solo ¡que mi novio me vendría a visitar!, Oliver y yo aproximadamente llevábamos una semana desde su rara y particular pedida de ser novios, o como quiera que se diga.

Cuando Fred y George me dieron la noticia, juro que casi se me va la vos de gritar, internamente claro, porque por fuera conserve mi postura calmada y serena, pero por dentro no, claramente.

Decidí levantarme de la cama sin hacer ruido alguno, no quería despertar a Ginny y a Hermione, al menos a ellas no.

A hurtadillas, salí de la habitación dirigiéndome al cuarto de los gemelos Zanahoria y Calabaza, hace tiempo no mencionaba sus apodos. Entre a la habitación abriendo la puerta de golpe.

No despertaron por el ruido, que sueño tan pesado tienen, entre dormido, Fred empezo a gruñir:

-Ni se te ocurra...George...Angelina es...mía. - Hizo una breve pausa.- A mi me gusto primero.

Vaya que cuando dicen que son iguales en todo, se referían a todo, hasta a las mujeres, quien sabe, incluso hombres.

Al otro lado de la habitación ya hacia la cama de George, quien se veía que dormía muy plácidamente, con baba y todo, bueno hasta que yo los despierte.

Me subí con cuidado a la cama de George ya que era la que mas se encontraba cerca, y dé repente me dio esquizofrenia y empecé a saltar como loca, la cama rechinaba como si estuviera haciendo otra cosa.

La reacción de George fue:

-AHHHHHHHHHHHHHHHHHH.- un grito muy agudo proveniente de su garganta estalló mis oídos, mientras se aferraba a la cobija y el oso de felpa con el que dormía, parecía niña pequeña.

Mientras tanto Fred, se levanto de golpe quedando sentado en el borde de su cama, con el cabello muy despeinado, por cierto el cual estaba muy largo, por lo menos mas de lo normal.

-Ay Christine, no veo la hora de que Oliver te saque de aquí, no te soporto.- Mascullo Fred de una forma odiosa y creída, pero sabia que lo hacia bromeando, ¿se imaginan que no?.

- Shhhh!, cállate.- Le ordene.- No pueden vivir sin mi.- Dije antes de tirarme a su cama dramáticamente.

-Pues claro.- Respondió George tomando impulso desde la otra parte de la habitación para abalanzarse contra mi. Este hombre cuanto pesaba?, Para rematar, Fred LITERALMENTE, salto sobre nosotros.

-Fred?, tienes mi suéter de rayas verdes y amarillas?.- Dijo una vos proveniente de la puerta de la habitación, era Ron. - Yo tambien quiero.

-Noooooo.- Muy tarde, ya se me iban a salir las tripas.