GUARDIAN- ENGLOT

CAPÍTULO 12

Engfa

No sé por qué la había invitado, digo si nos hemos vuelto cercanas, incluso Tina lo ha notado y me lo hizo saber el otro día en una conversación incómoda mientras Charlotte estaba ensayando en el escenario.

- Hey Waraha, ya tenemos todos los protocolos para Corea del Sur, se los enviamos a la empresa y lo aprobaron- asentí viendo a Charlotte bailar.

- Es buena bailando y cantando, digo no me gustaba mucho su música, pero Heidi me la hizo escuchar hasta el hartazgo y bueno ya me sé un par, pero parece que a ti te gusta algo más no- me detengo de mirar a Charlotte y giro hacia Tina.

- ¿De que hablas?- le pregunto.

- Vamos Engfa, hemos estado trabajando juntas que, cuatro años y nos conocemos desde antes, y jamás habías tratado a ninguno de tus clientes como la tratas a ella- niego sin dar idea de que habla.

- La trato como he tratado a todos, no sé de qué hablas, la protejo y me aseguro que nada le pase- le digo volviendo a mi posición y mirando alrededor y centrándome en el escenario.

- Claro, dime una cosa, a nuestros antiguos clientes los cargabas en brazos solo porque se sentían cansados, o no lo sé, jugabas con ellos a las mojadas, no lo creo Engfa, además, ¿dónde está la chamarra con la que viniste?- miro a Charlotte en el escenario y tiene puesta la mía, ya que se había olvidado de la de ella.

- Se olvidó de la suya qué tiene de malo- le digo, rogando para que la conversación terminara.

- Si claro y todo ese staff que la rodea está de adorno, por favor, me voy, tengo que llevar a firmar esto a la empresa, no le vayas a mentir a nadie más- dice riéndose mientras se va y le muestro el dedo medio.

Desde entonces soy consciente de lo que hago, pero de todos modos es difuso, con ella fluye de forma natural ni yo sé cómo explicarlo.

Llegando a casa sale mi hermana que queda como idiota delante de ella, cuando la llevo al patio trasero están incluso mis primos lejanos como si fuera a irme a la guerra y eso que le dije a mamá que no hiciera nada grande, pero como siempre exagera.

Charlotte agarra mi chaqueta desde atrás y veo que está muy nerviosa, mira a todos que están viéndola con ojos enormes, miro a mamá e incluso ella está eclipsada.

- Hola familia, ¿Plaifah ya se comió todo?- digo y eso parece despertarlos porque se ríen y vienen a querer presentarse, pero mi mamá les gana.

- Mamá, ella es Charlotte, Charlotte mi mamá- les digo y Charlotte sale básicamente de atrás mío.

- Es un gusto señora Waraha, siento mucho venir sin previo aviso- le dice y mi mamá la mira como si fuera una niña adorable.

- Oh, no querida, llámame Carla, y no te preocupes, puedes venir cuando gustes, eres tan bonita, siempre te veo en la televisión, pero eres más hermosa en persona- le dice pellizcando sus cachetes.

- Okey mamá tranquila, ¿dónde está, papá?- le pregunto y me apunta a la parrilla.

- No quería venir con las manos vacías, así que le traje esto Carla- Charlotte llamando a mi mamá por su nombre es irreal incluso para mí.

- Cariño que gesto más lindo, ¿por qué no haces eso cuando vienes?- dice pegándome en la cabeza.

- Mamá, eso duele, será porque soy tu hija, no debo traer nada- le digo y me mira para golpearme devuelta, pero pongo a Charlotte delante de mí.

- Protégeme por favor esta señora me quiere matar- le digo y ella ríe dándole las cosas a mi mamá.

- Llevaré esto a la cocina, preséntala a la familia que se están muriendo por conocerla- asiento y pasamos por todos mis tíos y primos, les advertí a todos que nada de fotos ni autógrafos, ya se los conseguiré en otro momento.