Adventure

(7) Cita o engaño

Matías estaba besando mi cuello de una manera muy delicada, lo cual me estaba encantando. Sin embargo, en ese momento surgió una preocupación: ¿y Enzo? Si bien sabía que Enzo no se molestaría mucho, no quería que Matías pensara que lo estaba utilizando como un juego y que le iba a hacer daño. No quería que me odiara ni que dejara de hablarme. Además, no quería que tuviera una mala impresión de mí o que su amistad con Enzo se viera afectada por mi culpa. Todos estos pensamientos inundaron mi mente en cuestión de segundos y en ese preciso instante, algo me desconcentró de mis pensamientos: mi celular comenzó a sonar. Para mi sorpresa, era una llamada de Juani. Resultaba extraño, ya que él nunca me llamaba sin avisar o preguntarme antes.

Matías se me queda viendo por algunos segundos.

- Dale, contesta, mira si le pasó algo, mientras yo voy a bañarme -dice Matías con una pequeña sonrisa.

Antes de que se fuera, me da un tierno beso en la mejilla y me acaricia el rostro para después irse con una toalla en la mano y el pijama.

Contesté la llamada y, preocupada, le hablé.

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Juani 💕

¿Juani? ¿Estás bien?

No, estoy de la mierda. Dios, perdóname que te llame así, pero eres la única a la cual le tengo más confianza.

Dijo Juani sollozando desde la otra línea.

No te preocupes, Juani. Entiendo cómo te sientes. Dime qué pasó, por qué estás así.

Le dije con comprensión.

Fui a la cita y todo iba bien. Y ella, en un momento, fue al baño y dejó su celular en la mesa cerca de mí..

Juani hizo una pausa, su voz quebrándose de nuevo.

Y, en eso, le llegan unos mensajes y el nombre del chat era 'Amor'. Yo en ningún momento agarré su celular, pero estaba a mi vista y podía ver claramente. El gil ese le seguía mandando mensajes muy comprometedores. Y cuando ella llegó del baño, le pregunté directamente si estaba con alguien más y, como no quería llorar delante de ella, me fui. Su cara me dijo todo. ¡Gila de mierda, la odio!

Juani, ¿dónde estás ahora?

Le pregunté preocupada.

En mi casa

¿Quieres que te vaya a ver?

No, no, no. No te preocupes. No es para tanto. Solo necesitaba desahogarme y... no sé

suspiró Juani desde la otra línea.

Juani, sé que estás pasando por un momento difícil y te entiendo completamente. Es comprensible que te sientas herido y confundido por lo que pasó. Pero tú no tienes la culpa de lo que sucedió. No mereces ser tratado de esa manera y mereces estar con alguien que te valore y te respete.

Es normal sentir dolor y enojo, pero quiero recordarte que tú eres una persona fuerte y valiosa. No dejes que esta experiencia te haga sentir menos. Permítete sentir todas las emociones y desahogarte, pero también recuerda que con el tiempo sanarás y encontrarás a alguien que te merezca.

Estoy aquí para ti, Juani. Si necesitas hablar, desahogarte o simplemente estar acompañado, no dudes en buscarme. Recuerda que no estás solo y tienes personas que te apoyan.