79

17.7K 1.1K 32
                                    

Damon.

Me está ignorando.

Cuando iba a ver a mi hijo me cerró la puerta en la cara.

Joder.

Tenía que sacarme esta mierda del dedo. Pero se me olvidó.

¿Ahora como mierda le explico esto?

Si le digo la verdad. No podré conquistarla. No me dejará.

Pero si no se la digo.

Cuando lo descubra.

Me va a odiar.

Aunque lo hará de todos modos si recupera los recuerdos.

Joder.

Apenas llegó Alan. Me vine a mi casa. Acá en Italia obviamente.

Lincon se vino a las horas después. Insistió en que tenía que hacerle observaciones a Akira.

Mierda.

¿Qué puedo hacer?

¿Cómo hago que ella entienda todo?

No me quiero casar. Pero lo tendré que hacer.

Jamás he matado a una mujer, pero lo haré...

Y ambas cosas lo haré por ella.

Han pasado dos días desde que me fui de ahí y Lincon no está.

Ahora mismo. Lincon fue a ver a Akira. Yo no fui porque, primero. No me quiere ver... y segundo porque sé que no me recuerda. Pero sigue siendo ella. Y temo salir apuñalado o con algo enterrado en mi cuerpo.

—¡Amor llegué!—Una voz me deja estático.

Joder.

¿Qué hace ella aquí?

¿Y quién coño la dejó entrar?

—Mierda—Maldigo mientras salgo de la oficina.

Camino rápidamente hasta que llego a la entrada. Mierda.

Por favor no.

Que esto sea una pesadilla por favor...

—¡Amorcito!—Grita y se me lanza encima.

Joder.

—¿Quién coño te dio mi ubicación?—Me separo de su intento de abrazo.

Sigue igual.

Vestida como una puta niña.

—Fui yo.—Aparece Gregor.

Joder.

Lo que faltaba.

—¿Qué hacen aquí?—Siseo irritado.

—Están comprometidos. Necesitan convivir para adaptarse...

—Creí que sería un matrimonio tradicional. Según las reglas...

—Las reglas son para romperse.—Me interrumpe Gregor.

—Gregor...—Advierto.

—No te enojes con mi tío.—Chilla la puta Naomi—Fue mi idea.

—Claro que iba a ser tu idea.—Susurro con fastidio.

—Bueno. Los dejo tortolitos...—Habla Gregor dirigiéndose a la puerta.

—No. No Gregor no acordamos esto.—Alego, pero es demasiado tarde.

El viejo hijo de puta se ha ido.

—Traje maletas... ¿Podrías ayudarme?—Su diminuta voz me saca de quicio.

Joder.

Parece hasta que finge la voz como una niña.

—Me gusta poder hablar contigo en mi idioma natal.—La veo como se sonroja.

—A mí no.—Digo.

—Te escuché.—Se cruza de brazos.

Joder.

—Damon te traje una sorpresa fue difícil convencerla, pero...—Dice Lincon mientras las puertas se abren. Dejando ver a Akira y mi hijo.—Mierda no sabía que tenías visita...

Fantástico.

Genial.

Esto era lo que me faltaba.

Akira viendo esto.

A esta mujer...

A mi futura esposa.

Dominame ✓ [Terminada, primer Libro]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora