//Farsa//

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Craig ♣.

Mire todo a mi alrededor, nadie venía cerca.
Apreté las manos agachado la mirada.
Ahora que no había nadie podía sacar mi verdadera emoción.
Esto se sentía de maravilla.
Estaba ansioso por encontrarme con Tweekers.

Jamás había mirado con atención los amaneceres en este pueblo, eran increíbles, el cielo adoptaba colores parecidos al de los moretones en pieles enfermas.

Aunque lo intente reprimir, no pude evitar ponerme algo rojo de las mejillas al pisar terreno de los Tweak.

Camine a través del jardín delantero, llevaba mucho tiempo viniendo aquí, y como siempre, estaba estacionado un auto un poco oxidado que había pertenecido al Sr. Tweak desde (por lo que me había contado el rubio) los 18.
Su padre también se lo había obsequiado y queriendo hacer una tradición, él se lo dio a Tweek por su cumpleaños número 16, a pesar de que él ya había conseguido su permiso de conducir, no quería usarlo ya que lo presionaba por la cantidad de choques que el piso congelado causaba en el pueblo.
Tras el pasó de los años sin ser usado el auto comenzo a deteriorarse hasta quedar así.

Llame a la puerta un poco inseguro, aún había tiempo de huir, pero ya había caminado 20 minutos como para echarme para atrás y salir corriendo como si fuese un cobarde.
Debía dejar esos asuntos del nerviosismo a un lado y actuar con naturalidad.

Aunque no me sentía tan yo sin mi acostumbrado gorro, este que había cogido me quedaba un poco pequeño.
Pero era mejor a nada.

-Hola.

El Sr. Tweak abrió la puerta con una taza en la mano y una etiqueta con su nombre en su suéter café.

-¿Está Tweek?.

Comencé a ponerme nuevamente nervioso.
Ahora se sentía diferente al tratar al padre del rubio.

-Sí, está arriba duchandose.

El hombre apunto con el pulgar hacia atrás.
Indicando lo obvio.

-De acuerdo, bueno, esperaré aquí.

Dije con la intención de sentarme en el escalón de la entrada y esperar hasta que él saliera, pero antes de que pudiera hacerlo el Sr. Tweak tomó mi hombro y me hizo adentrarme a la casa a la fuerza.

Joder!, esto es tan Tweek*.

Pensé en cuanto me recibió el olor a café al instante de entrar a la casa, no era completamente igual a su olor pero si se apreciaba que era parecido al que él tomaba siempre.

Cuando quise oponerme a la invitación/secuestro ya estaba en la cocina en donde la Sra. Tweak preparaba el desayuno.

-Hola Craig, ¿que sorpresa que estés aquí?.
Hace mucho que no te recibimos nosotros.

La mujer puso frente a mi una taza de café y luego le sirvió más café al Sr. Tweak, no planeaba tomarlo, me gustaba el café pero no tanto como a todos ellos.

-Cierto.
¿y cómo vas con tus estudios?.

Pregunto el hombre sentándose al mismo tiempo que su mujer.

-Aún no estoy preparado del todo, pero Tweek me ha ayudado a entender muchas cosas.

La mujer sonrió orgullosa y el Sr. Tweak asintió como si confirmará lo que había dicho.

-Que bien, me alegra que mi hijo también pueda ayudar.
Por cierto Craig, ¿tú eres su mejor amigo verdad?.

*Para mi mala suerte solamente era eso*.

Tiembla por mí (Craig & Tweek).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora