Eso de él.

2.7K 333 175
                                    

Tweek ♧

Mis sentidos seguían perdidos, no preste atención a ninguna clase que llevaba durante todo el día, ni siquiera había estado pendiente de que mi vaso de café ya no tenía líquido desde hace 50 minutos.
Había entrado a un tipo de trance desde que había pisado el escalón de entrada.

No iba a estar conmigo, sino con otro chico.

Me sentía furioso por sentirme de ésta manera.
Aunque me esforzaba, la idea de que Craig había preferido estar con Thomas en vez de mi me estaba consumiendo.

"Es sólo su amigo, simplemente le mostrará el pueblo"

Intentaba calmar mi ansiedad, bueno mi ansiedad mental por que al reflejarme con los vidrios de la escuela mi postura era simple, tranquila, como si no hubiera un alma dentro de este cuerpo.

-Tweek.

Gire despertando de mi sueño mental.

-¡Gha! ¡ah! ¿qué?.

-¿Qué haces aquí?.

Pregunto seriamente el chico de cabello rojizo apagando con su pie el cigarrillo que ya estaba totalmente consumido.

-¿Eh? ¡ngh! Iba a la cetrería.

Pete entre cerró los ojos y apunto con su pulgar detrás de nosotros.

-La cafetería esta atrás.

Mire sobre su hombro al lugar, sentí el ardor en mis mejillas.

-¡Oh! Y, y ¿tú que haces aquí?.

Traté desviar la antigua conversación.

-Tenía que... ya sabes fumar, la directora me prohibido fumar dentro del colegio así que tuve que salir al estacionamiento.
Perra conformista.

Craig, ¿qué estaría haciendo?, ¿me extrañaría? Seguramente no tanto como yo lo extrañaba a él.
¿Sería cierto lo que me dijo cuando le obsequie la pulsera de café?.

Me estaba volviendo loco yo mismo, tal vez estaba haciendo todo lo contrario o realmente lo que yo pensaba, mi mente jugaba bruscamente.

-¡Tweek!.

Me sobresalte al escuchar la profunda voz de Pete gritarme.
Grité ante ello tirando mis libro, saliendo la prenda azul que llevaba escondida entre ellos.

De inmediato me puse en cuclillas para intentar alzar todo de golpe, pero al hacerlo Pete también lo hizo tomando antes que yo una de mis cosas favoritas.

-¿Qué es esto?.

Pregunto extendiendolo en su totalidad.

-¡Ah! ¡nada!.

Se lo arrebate de las manos metiéndolo entre mi pecho y los libros que ya habían recogido.

-¿A caso es...?

Negué mucho antes de que dijera lo que seguramente ya sabia.

-¡No es nada!.

Ahora si mis mejillas ya estaban rojas y mi pasivo rostro estaba recuperando sus nervios y aus tics.

-Oh, claro que es algo.
Es el gorro de Tucker.

¡Ah! Joder.
Por primera vez en mi vida consideraba comenzar a usar una bolsa en la cabeza para ocultar mi vergüenza.

-¡No!.

Grite poniéndome de pie dispuesto a huir.

-Por cierto, ¿dónde está ese cabrón?.

Tiembla por mí (Craig & Tweek).Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum