Rachel, Tony & Terry

Rachel

Rachel

No sé cómo definir lo que Tony es para mí. Es como, un buen compañero.

Han pasado tres semanas y enero ya está terminando. He comido con Tony todos los días, he "hablado con él" (la mayor parte, yo hablo) ya no es tan serio pero aun así, no habla mucho.

Hemos tenido que pasar un par de veces a hablar en clase, Tony falta esos días. No sé si es por su pánico escénico o por algo más.

Terry siempre me encuentra en las calles y Tony, detrás de él.

Mis viejos amigos siguen preguntando por mi salud mental. Yo sigo diciéndoles que no soy Rachel, soy su gemela. Ellos siguen rodando sus ojos molestos.

Me siento al lado de Tony ahora en clase. No hablo mucho con nadie, solo con quien no he hablado antes. Tony es el único con quien Rachel, la rubia jamás ha hablado.

Tony llega algo tarde pero no importa porque la profesora aún no está aquí.

Se sienta y tiene la cara extraña. No, no en el mal sentido. Se ve confundido.

—Tony. —Le digo.

Él saca una flor de su mochila y río. — ¿Qué es esto? —Pregunta.

Respondo riendo. —Una flor, Tony.

Niega.

Aclaro: —Aquí hay un estúpido baile de San Valentín cada año y está esta tradición en donde te dejan flores pegadas a tu casillero si a alguien le gustas, ese día en el baile, llegan con una flor idéntica a la que pegaron y te confiesan su amor.

Tony frunce el ceño. —Fue una broma.

Ruedo los ojos. —Tal vez debas aceptar que le gustas a alguien.

Niega. —No. —Hace su cabello hacia atrás—. ¿Te dieron a ti alguna flor?

—Sí, como cuarenta. —Miento—. Soy tan codiciada.

Sonríe. —Sí, claro.

Lo fulmino con la mirada. —Así que, ¿Quién podría ser tu doncella?

Lame sus labios. —Debió ser una broma, Rachel. La gente se burla de mí todo el tiempo, pero está bien, ya no importa nada de eso.

Frunzo el ceño por su afirmación, pero no vamos a entrar todos melodramáticos así que comienzo a buscar algo detrás de él.

—¿Qué? —Pregunta.

—Oh, es solo que... —Sigo fingiendo—. Escuché muchas palabras salir de ti, quiero ver cuando el mundo comience a quebrarse.

Tony me tira la flor en la cara.

—Oye, ahora hablar y eres agresivo.

Y tony me sonríe. —Enserio, ¿Te dieron alguna?

Asiento. —Dos. —Confieso—. No tengo idea quien fue pero las tomé y las tiré a la basura.

Tony juega con sus dedos.

***

Como te dije antes, las cosas van progresando con Tony. Estamos en la cafetería y por lo menos ya no es un dialogo de una sola persona.

—¿Iras al baile entonces? —Me pregunta.

Arrugo la nariz. —No, que asco.

Sonríe mostrando un hoyuelo que no sabia que tenia. —Deberias, dices que eres la reina siempre.

—Lo soy. —Le robo un trozo de su pizza—. No lo olvides.

Tony mueve su pizza hacia mi. —Jamas, me lo repites a diario.

Sonrío mientras mastico mi pizza. Danielle se está acercando. —Oh, Dios. —Tony sabe que aquí es donde alguno de mis viejos amigos se acerca—. Ya sabes el plan.

Asiente con una sonrisa complice.

Danielle sonríe. —Hola chicos, que bien se ve esa pizza. ¿Dónde la conseguiste, Rach?

Quito pelusa de mi sueter.

Ella se gira a Tony. —Hola Tony.

Levanta su mano para saludarla.

Aquí es donde hacemos el plan. Levanto mis dedos en forma de teléfono. —¿Hola? ¿Hola?

Tony sonríe.

—¿Tony?

Él me imita. —¿Si?

—¿Escucho interferencia nivel Danielle, puedes decirle que se aleje para que comamos en paz?

Tony muerde su labio.

—Tony, ¿Crees que la gente alguna vez entienda cuando les dices que ya no te agradan?

Danielle cruza sus brazos. —Rachel, no seas cruel.

Tony baja su mano pero yo no. —Dani, dulce Dani, tengo una llamada aquí así que, ¿Por qué no te vas?

Ella niega. —¡Somos tus amigos, Rachel! Queremos estar ahí para ti cuando sea tu cumpleaños.

Estúpida. —Adios. —Le digo pero no se va.

—Rach, por favor.

—¡Adios! —Me levanto de la mesa y camino fuera de ahí. Digo a un profesor que iré al baño y corró lejos.

Estúpida.

No sabe nada. Nadie sabe nada.

Cada vez que pretender ayudarme, solo hacen que me recuerde lo que tanto he querido olvidar. 

¿Que creen que Rachel quiere olvidar?  Gracias por leer :D