Mil Sueños Por Cumplir (Inazuma Eleven)

Cap.12

Miro fijamente el techo de mi habitación. Después del día de ayer no he vuelto a salir de casa. Hacía tiempo que no jugaba un partido de fútbol y me lo pasaba tan bien. Al estar en la Royal Academi acabé perdido todo mi entusiasmo por él. ¿De verdad ha valido la pena luchar tanto por ese equipo? Mi cabeza está hecha un lío. Hago la croqueta por la cama y cojo el mando. Le doy al play y vuelvo a ver por enésima vez el video del partido. Royal Academi contra el Wild. Se que han echo trampas y que nos tocara enfrentarnos a un equipo de alto nivel. ¿Y por qué no empezar eliminandonos contra el equipo que el año pasado llegó a la final?  Aun asi le doy un buen repaso a todos los partidos. Me tiro como toda la tarde y gran parte de la noche para terminar de ver todos los partidos sin dejarme ni un milimetro de la pantalla por analizar. Son las tres de la mañana cuando termino y antes de poder apagar la televisión caigo rendida en la cama.
A las siete de la mañana como es costumbre, mi gran amigo el despertador, me levanta con su mas bonita melodia... Bonito va a quedar él cuando le estrelle contra la pared como no se calle. Me voy arrastrando por el suelo mientras intento ponerme en pie. Cuando llego al baño y me miro  en el espejo, me asusto al verme. Tengo las ojeras mas grandes que he visto en mi vida y los ojos rojos. Toma ya di que si, adelantandome para Halloween. Busco el maquillaje para darmelo y que no se note tanto lo poco que he dormido hoy. Pero no lo encuentro por ningún lado. Se me cae el peine del lavabo y cuando me agacho a cogerlo acabo tirada en el suelo con una pierna a lo alto y con dolor de cuerpo entero. Si, es que mi vagueza llega a veces a tales extremos que no recojo la alfombrilla de los pies por pereza. Esa asesina en serie ha sido la que ha provocado mi caida. Dios que día me espera hoy.

Me paso las horas durmiendo en clase con el fin de recuperar el sueño que he perdido. Llevo puesta unas gafas negras que me tapan mis maravillosas ojeras y tambien con ellas puedo dormir sin que nadie se de cuenta. Soy un genio. Cuando por fin terminan las clases me dirijo sin mucho ánimo a la caseta del club. Llego como quince minutos tarde y tampoco pienso correr para llegar. Hoy estoy excesivamente vaga. Ando zombie por lo que muchos alumnos se giran para mirarme, pero paso de ellos que piensen lo que quieran, hoy no estoy para peleas. Sin darme cuenta, llego a la caseta del club. Hoy mi cerebro debe de creer que somos fantasmas porque ni me digno en abrir la puerta y me la como de lleno. Se oye la puerta abrirse.

- ¿Crítal? - dice la voz de Silvia.

- Hola Silvia guapa, ¿me ayudas a levantarme de mi querido amigo el suelo?

Hoy no se porque pero todos, hasta el suelo, son mis amigos. Silvia me ayuda a levantar.

- Pero ¿que te pasa? - dice cargando conmigo y entrando a la caseta.

Rapidamente Axel, lo sé por su colonia, me coge en brazos y me tumba en una de las colchonetas que hay en el club. No abro los ojos pero me siento rodeadas por personas.

- ¿Creeis que ha muerto? - djce Jack.

- Yo creo que es un zombie - salta Nathan.

-Creo que Nathan tiene razón - susurra Todd.

- Oh, gracias por los ánimos, que palabras más bonitas me han llegado al corazón - digo sarcasticamente.

- Ah sido sarcastica eso es malo - dice Nelly.

Me incorporo un poco y la miro por encima de las gafas.

- Codigo 35 - digo haciendo un puchero con la boca.

- ¿Código 35? - dice Mark extrañado.

- Código de chicas - interviene Celia - a le mientras nosotras la arreglamos ir a entrenar vamos, vamos.

Y de un segundo a otro los chicos desaparecen de la caseta y me permito quitarme las gafas.

- Estas fatal - dice Nelly por la que las demas afirman.