Cap. 35

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Salgo del hospital con ayuda de unas preciosas muletas. Gracias a Dios solo tenía un esguince así que solo me perderé un partido, y aun así, estoy dándole la lata al entrenador para que me deje salir.

- Solo el primer tiempo por favor - le suplico mientras andamos al coche para volver al instituto.

- No.

- Bueno quince minutos - me mira obvio - bueno diez, no bajo mas mi limite.

Pasa de mi y sigue caminando como si esta conversación no tuviera lugar. Me giro frustrada.

- Jude dile algo.

Jude ni si quiera se entera de que le estoy hablando.

-¿Axel?

Axel niega con la cabeza serio y vuelve que preguntarme si quiero que me lleve en brazos. Suspiro sonoramente y miro a mi única y última esperanza.

- Mark, te veo muy bien hoy - digo inocentemente.

Se rasca la nuca y desvía la mirada hacia los dos chico que tiene al lado, que le fulminan con la mirada. Si, cuando se trata se mi seguridad, Jude salta como un resorte.

- Ya sabes que yo te dejaría pero si llego a hacerlo estos dos de aquí me descuartizan y me tiran a los cocodrilos.

Los otros dos asienten satisfechos de su capacidad de intimidación. El ego y los hombres...
Llegamos al instituto y al entrar en el campo todos se abalanzan hacia mi. Menos mal que tengo a mis queridos guardaespaldas para detenerles antes de que acaben encima mía.

- Quietos ahí - dice Jude.

- ¿Que queréis matarla? - dice esta vez Axel.

Los chicos retroceden entre disculpas y Mark aparece por detrás emocionado por entrenar. Los chicos se van a entrenar y Jude y yo nos sentamos en un banco un poco alejado pata que a mi no me entren ganas de jugar.

- ¿No deberías de volver a la Royal? - le pregunto.

El niega con la cabeza sin mirarme.

- Palabras textuales, no vuelvas hasta que Crístal este recuperada del todo - dice cantarín.

Suelto una carcajada y apoyo el pie malo en el banco.

- Ven, recuestate - dice atrayendome hacia él.

Las mejillas me arden cuando me obliga a poner la cabeza sobre sus piernas y me acaricia el pelo mientras me mira con ojos ardientes. Nos quedamos sin decir nada, hasta que rompe el silencio.

- Crístal yo... - dice tocándose la nuca.

Le miro con curiosidad esperando que diga algo.

- No nada - dice distraído.

Frunzo el ceño, no hay cosa que mas me joda que alguien me deje con la intriga.

- Dímelo Jude, por favor - digo intentando camelarle.

- No me puedo controlar cuando te pones asi, ya lo sabes - dice con voz ronca.

Sonrió malvadamente. Subo mi cabeza hacia la parte alta de sus piernas y la muevo hacia los lados. Jude se tensa debajo de mi y continuo con los movimientos.

- Crístal....

- ¿Qué? - pregunto inocentemente.

- Así que esas tenemos ¿eh?

Se asegura de que nadie puede alcanzar a vernos, gracias al árbol que nos tapa completamente y coloca su mano en el dobladillo de mi camiseta. Un escalofrío recorre mi cuerpo cuando sus dedos recorren la parte baja de mi tripa y van subiendo poco a poco. El deseo explota por todo mi cuerpo. Hace mucho que Jude y yo no tenemos sexo y mi cuerpo lo esta pidiendo a gritos. Me retuerzo y cierro los ojos. Un gemido se escapa de mis labios. Su mano se cuela debajo de mi sujetador y atrapa uno de mis pezones entre sus dedos. Los retuerce continuamente y yo lo único que puedo hacer es taparme la boca para que nadie me oiga. Saca la mano para llenarla de saliva y vuelve a torturar al pezón que ahora esta mucho mas erguido. Si estuviéramos en un lugar mas intimo se como acabaría la cosa pero por ahora me conformo con sentirle así.

- Jude - digo al borde del éxtasis.

Sonríe diabólicamente y saca la mano haciéndome cosquillas por su paso.

- No... - gimoteo.

Se levanta y me deja con cuidado la cabeza en el banco.

- Me parece que vas a tener que terminar tu misma con el trabajo.

Entorno los ojos mientras veo como se aleja con las manos en los bolsillos. Maldito Jude...

***

Durante lo que queda de entrenamiento me dedico a matar a todos con las muletas. La verdad es que doy un poco de pena pero con tal de no pensar en lo que ha ocurrido antes... Un escalofrío me recorre el cuerpo cuando recuerdo los dedos de Jude recorrer mi cuerpo. El muy idiota sabe muy bien como volverme loca, pero la próxima vez no pienso dejar que se salga son la suya. Lo mejor de todo esto es que el pobre ha tenido que ir a descargarse.
Sigo matando a todo lo que se pone enfrente mía consiguiendo pensar en otra cosa que no sean las manos de Jude ni la erección que se le adivinaba en los pantalones. El aburrimiento se apodera de mi y me cambio de banco para poder ver el entrenamiento. Empiezo a inventarme diálogos.

- Mark me pones mucho - dice Kevin.

- Kevin sabes que a mi me gusta Nathan.

- Mark, nuestro amor es imposible mis padres no lo aceptarían - dice Nathan esta vez.

- O vamos chicos dejaros de comportaría como nenazas y hagamos una orgía todos juntos - dice Axel.

Los chicos le dan la razón.
Me pongo las manos en la barriga del ataque de risa que me acaba de dar. Debo parecer retrasada riendome sola en un banco y con una muleta apuntando a los chicos. Cuando consigo calmarme me quito las lágrimas que me recorren las mejillas.
*Narrador en tercera persona*

El chico se acerca con sigilo a la chica. Sabe que como le pillen puede caerle una buena.
Jude mira al chico de capucha negra que se acerca a su amiga. Siente el impulso de ir pero una mano le para.

- Espera - dice la voz de Axel.

El chico llega al lado de Crístal y esta se tensa.

- ¿Como te encuentras?

La chica se sobresalta y mira con miedo a su derecha.

- ¿Tu que crees?

El chico mueve las manos nervioso.

- Yo...

- Si has venido a volver a raptarme lo tienes crudo chaval - dice fríamente - no te voy a mentir te tengo miedo, pero no me da miedo luchar.

El chico suspira culpable. Si todo hubiera sido de otra manera... Si no hubiera necesitado el dinero... El chico se sienta a su lado y le entrega una carta. La chica la coge sorprendida.

- Ahí se explica todo - se levanta dispuesto a irse - cuando termines de leer quémala.

La chica le coge del brazo y le para en seco.

- No dejes que te controle, Aprodite.

Suelta una carcajada irónica y se va desapareciendo entre las sombras.
Jude y Axel salen de su escondite cabreados y la chica se guarda la carta corriendo. Por suerte los chicos no se dan cuenta.

- Me parece que tienes mucho que explicarnos ¿verdad?

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Nuevo capitulo, perdón por la tardanza pero he estado de comunión así que no he podido escribir nada. Besoooos.

Mil Sueños Por Cumplir (Inazuma Eleven)Where stories live. Discover now