Adicta a ti | T.O.P

Capítulo 11 | Tu verdadero nombre

Cuando Jessica se fue de Corea, Seunghyun inmediatamente sintió que algo de él se había ido con ella.

Los primeros días la extrañaba mucho: extrañaba su risa, la forma en la que lo trataba, sus ojos, sus labios, su compañía, las largas conversaciones y sentirla cerca de él.

No podía evitar pensar en la última noche que pasaron juntos y tampoco en cómo la había visto partir en el aeropuerto. Se habían dado un beso corto para despedirse, pero por alguna extraña razón sentía que había sido el más sincero de todos.

Pocas semanas después le habían llamado para terminar el nuevo drama que estaba grabando en Japón con su gran amiga Ueno Juri. Cuando regresó a Corea después del descanso de BIGBANG, él debía admitir que se sentía un poco atraído hacia su compañera.

Sin embargo, Jessica había llegado a cambiar todo.

No quería decirle que estaba enamorado pues aún no lo sabía y no quería prometer cosas que no sabía si cumpliría, sin embargo, hablaba muy en serio cuando decía que Jessica le gustaba mucho.

Los primeros días de filmación pasaron ligeros y rápidos. Juri los hacía muy amenos y además actuar siempre había sido una de sus cosas favoritas. Cuando tenía pequeños descansos, le mandaba mensajes a Jessica y hablaban por un rato. Pronto los pequeños descansos dejaron de ser recurrentes y  T.O.P se llenaba de trabajo cada día más, a tal grado que casi se la pasaba en el set todo el día al lado de su coestrella.

Extrañaba a la chica de los mensajes. Extrañaba esa cercanía que generalmente le molestaba. Deseaba estar a su alrededor.

Pero ella no estaba ahí.

Sólo estaba Ueno Juri.

Empezaron a salir. No eran nada oficial, pero salían a bares y restaurantes cada vez que podían, lo que lo llevaba a alejarse inconscientemente cada día más de Jessica.

Lo cual era irónico porque lo que quería era acercarse ella.

Juri lo había besado varias veces al salir de esos lugares, que él pensaba que estaban limpios de paparazzis. Sinceramente, cada vez que su amiga posaba sus labios sobre los de él, lo único que él quería hacer era estar en Estados Unidos, para que fuera Jessica quien lo besara.

Lamentablemente,  la noticia y las fotos de él y Juri besándose recorrieron todo el mundo. Lo que se leía en todas las páginas de chismes era ¿T.O.P y Ueno Juri son novios? Tuvo que aclarar muchas cosas con su jefe, Yang Hyun Suk, y también con los miembros de su grupo.

Las noticias llevaron a que los involucrados en el rumor llegaran a una decisión: sólo serían amigos.

Esa tarde, después de aclaradas las cosas, recibió un video de Jessica. Al ver la notificación en la pantalla de su celular, no pudo evitar sentir algo en el estómago. Esperaba de todo corazón que fuera algo relacionado con los rumores, un video de ella preguntándole que si todo era verdad para que él pudiera explicarle todo.

Consideraba a Jessica una persona prudente que pensaba las cosas antes de tomar decisiones.

Claramente al ver el video se dio cuenta de su equivocación.

¿Se sentía enojado? Sí.

¿Traicionado? También.

¿Celoso? Aún más.

Ver a Jessica besándose con otra persona era algo que no se había dado cuenta que le molestaba en demasía. Por las botellas al fondo, se dio cuenta que había tomado mucho y podía deducir que había estado borracha cuando había grabado y mandado el video.

No podía culparla, por mucho que le doliera verla en los brazos de otro, porque él la había herido con los rumores primero. Se habían herido mutuamente y ahora estaban a mano.

¿Eso dónde los dejaba?

No estaba seguro.

El drama terminó de filmarse y a los pocos días salió al aire. Había sido todo mucho éxito, lo que lo ponía contento, por otro lado, no dejaba de pensar en Jessica. Cuando llegó de nuevo a Corea y Hyun Suk lo llamó al edificio de YG, no esperaba que su jefe le pidiera su opinión para un mural que se pintaría en las oficinas de la empresa en Estados Unidos ni mucho menos que le pidiera supervisar el progreso de éste.

—¿No crees estar muy ocupado? De verdad me gustaría que fueras tú ya que tú eres el que me recomendaste a la artista —le dijo Hyun Suk mientras se acomodaba su característica gorra.

—No, a mí también me gustaría ir. Hace mucho que no voy a Estados Unidos —contestó.

En realidad, también estaba interesado en ver a Jessica mientras estaba ahí para aclarar las cosas.

—Perfecto, también mandaré a Teddy para que te haga compañía. Él se pondrá en contacto con su representante y todo eso.

Los papeles quedaron listos en una semana. No sabía ni siquiera si podría ver a Jessica, pues de verdad quería hacerlo y para ello necesitaría hablar con ella. Estaba seguro que no sería tan fácil.

El primer día en el que Emma empezaría a pintar el mural, Seunghyun estaba emocionado y curioso. Quería saber quién era la artista que lo había cautivado tanto con su exposición. Se dirigió a las oficinas de YG casi a la medianoche, pensando que no habría nadie.

Después de todo, quería respetar la decisión de la artista de mantener su identidad en secreto.

Si tan sólo él hubiera podido tomar esa decisión...

Cuando llegó al piso en donde se pintaría el mural y escuchó música, supo de repente que la talentosísima Emma seguía ahí. La vio por detrás, trazando en la pared sobre una escalera.

Ese cabello, esos movimientos, esa cicatriz en el cuello...

Todo sucedió en cámara lenta.

Ella se había estirado y estaba a punto de caer de la escalera. Seunghyun corrió rápidamente y logró atraparla antes de que cayera al suelo. Tenía cerrados los ojos, pero Seunghyun la reconoció: era Jessica.

¿O Emma?

La dejó rápidamente en el suelo y cuando Jessica lo miró, abrió sus bonitos ojos como platos.

—¿Q-Qué haces aquí? —preguntó ella con voz temblorosa.

¿Era ella la que debía hacer las preguntas?

Le había mentido.  Ella era Emma, ella era la artista.

Todo empezaba a encajar.

Nunca le había dicho la razón de su visita a Seúl, sólo que acompañaba a un amigo. Claro, ese "amigo" era su representante, como le había dicho Chaelin alguna vez.

Por eso había estado en Corea, por eso la había conocido en la exposición.

—Así que... ¿Emma? ¿Ese es tu verdadero nombre? —preguntó.

Ella se quedaba callada. No sabía si sentirse enojado o decepcionado.

Tal vez era una mezcla de los dos.