28. Sumando puntos restando compañeros

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El smarwatch anunció un nuevo punto.

- Tranquilo, estamos bien - anunció Cris tras una breve pausa.

No había momento para hacer recuento. Debían seguir con la estrategia. Ya darían luto y homenaje a las víctimas cuando volviesen a casa con la copa en las manos.

- ¿Alguien sabe de donde ha salido ese disparo? - preguntó Fabrizzio.

- Ni idea - contestó alguien -. Aun no hemos visto a nadie.

- ¡Un grupo de seis! - gritó Sam a través de los interfonos. - ¡Nos han acorralado cerca de la gran avenida!

- Tranquilízate - se escuchó la voz de Jake. - Busca un lugar seguro y reúnete con el grupo más cercano cuando tengas ocasión.

- No voy a poder - siguió hablando con la voz nerviosa y la respiración agitada -. Estoy rodeado. Oigo voces por todas partes.

- Quédate donde estás. Busca donde esconderte y pronto se alejarán - aconsejó otro compañero.

-Creo que voy a correr - comentó. - Soy más rápido que ellos. Y me seguirán. Podré alejarlos de vosotros.

- Pero no sabes cuántos son en realidad. Podrías dar con un número más numeroso - aconsejó Jake.

La respiración agitada de su compañero sustituyó cualquier palabra.

- ¡Danos la pelota! - ordenó Fabrizzio. - Cambiaremos de dirección y haremos que nos sigan.

- De acuerdo - afirmó Cris.

Acto seguido vieron como sus dos compañeros se acercaban sigilosamente hasta su posición.

Intercambiaron miradas de poco entusiasmo además del esférico.

- ¡Dejadme ir! - gritó Sam. - ¡No me hagáis nada, por favor!

Sus súplicas se escucharon entre todos sus compañeros y se compadecieron por él.

- ¡Aahh! - un grito lleno de agonía y después perdieron la comunicación con él.

«Veinticinco»

- No os desaniméis, chicos. Ya les llevamos ventaja. Procurad que no os descubran. Pronto estaremos de vuelta a casa.

Victoria paró sobre sus pasos al escuchar el grito de su compañero. Jake se percató y le hizo un gesto para que continuase la marcha. Pero ella, decidida, cambió el rumbo y volvió sobre el camino recorrido.

Jake miró al cielo y puso los ojos en blanco decepcionado y luego la siguió. 

- ¿Dónde crees que vas? - le preguntó llegando a su altura.

No hubo respuesta pero todo estaba dicho.

- Vas a hacer que nos maten a todos - añadió.

- Una vida menos - dijo al fin.

- Deberíamos seguir el plan - intentó convencerla.

- El plan es una mierda - espetó -. Si no les plantamos cara pronto acabarán con nosotros uno a uno. No voy a esperar a que me encuentren y acaben conmigo. Voy a enfrentarme a ellos de cara y eliminar el mayor número de enemigos que encuentre.

Su instinto asesino había despertado. 

Durante el trayecto había estado recordando la muerte de Diego y seguía consumiéndola por dentro.

Sentía que debía hacer algo para afrontar ese dolor.

La ira ardía en sus ojos como una llama ardiente.

Jake la agarró del brazo y la arrastró hacia la pared de un edificio, inmovilizándola.

- ¡Suéltame! - le gritó, antes de que él tapara su boca con la mano.

Luego señaló sus ojos con los dedos y después estiró la mano para advertirle de la presencia del enemigo indicándole hacia dónde debía mirar.

Un grupo de cinco personas entró en la calle por donde ellos habían llegado. Se dirigían hacia ellos a trote agarrando firmemente sus armas con ambas manos.

Victoria quiso salir al encuentro pero sabía que estaba en inferioridad frente a esas armas de fuego. Jake la atrajo al local más cercano salvando así su vida.

Pero un dron volador accedió con ellos al recinto para no dejar de emitir las imágenes al mundo entero y eso delató su posición.

Escucharon como uno de ellos gritaba y anunciaba a sus compañeros el paradero de su presa. Acto seguido corrieron hacia el local esperando acorralarles dentro.

Les habían encontrado y no les dejarían escapar.

⚽DEAD BALL SPORT [Terminada]✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora