Capitulo 15

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Llegar a casa después de lo sucedido fue una catástrofe. Aleksandra recibió comentarios de todos al mismo tiempo. Unos la felicitaban por salvar la vida del niño, otros la regañaban por haber hecho algo tan peligroso como estar expuesta tanto tiempo a la sangre humana... pero por otro lado estaban Edward y Rosalie sin decir nada. Sabía que se debía a que Alice había visto a Caius en su visión.

—Eso fue muy peligroso, pero aún así estoy orgulloso de que salvaras una vida —Carlisle la miraba fijamente.

—Tú control fue magnífico, estoy segura que ahora serán las cosas más fáciles para ti —Esme le sonrió a Aleksandra, la cual solo bajó la cabeza avergonzada. La mayoría del tiempo no hacía muchas cosas para no llamar la atención, así que eso la hacía sentir incómoda.

—Creo que eso es lo de menos ahora mismo —Rosalie se levantó de golpe con el rostro lleno de enojo. Sus tacones de aguja hicieron un fuerte estruendo en la habitación.

—¡Rose, ya hablamos sobre esto! —Emmett también se levantó y tomó a su esposa por el brazo con algo de fuerza.

Sabía a qué se debía su enojo, pero la verdad es que no tenía ganas de aguantar regaños. Los últimos días había estado con un humor tan extraño, con el cual no aguantaba ni un chiste porque se molestaba. Miró fijamente a Rosalie y de inmediato se sintió juzgada.

—¡No puedo quedarme callada ante esta situación! —Rosalie exclamó— esto que estás haciendo es un peligro para esta familia y para todo lo que hemos logrado todos estos años.

—Ni siquiera sucedió nada, además no es de tu incumbencia —Aleksandra le respondió sin prestarle mucha atención. Sabía que esa discusión se alargaría, pero aún así no tenía ganas de nada mas que salir a pasear un rato para volver a pensar en los sucesos de aquel día.

—¡Por supuesto que es de mi incumbencia!. Caius es malo y lo sabes, no sé porque te encaprichas con él si ni siquiera lo conoces de nada —Rosalie gruñó.

—No hablemos de cosas que no han sucedido. Además yo no te puse ningún pero cuando decidiste convertir a Emmett sin preguntar —Aleksandra respondió ya bastante molesta. Sabía que aquel era un tema serio, pero aún así siguió hablando— tú fuiste la que se encaprichó, y todo solo porque ese chico moribundo que encontraste en el bosque te recordaba al hijo de tu vieja amiga... es más, ni siquiera sabías si sentías algo por él, solo pensaste en ti misma y no en nosotros.

Rosalie se quedó en completo silencio, aunque aún la seguía mirando fijamente. Sabía que le había dado a algo en lo que no se debía meter, pero en ese momento no le interesaba en lo absoluto si la hacía sentir mal. A veces le gustaba hacer comentarios groseros, pero no le gustaba recibirlos, así que no la entendía en lo absoluto.

—¡Alek!

Carlisle se puso de pie una vez que Aleksandra sonrió burlesca a Rosalie, la cual estaba a punto de saltar hacia ella para atacarla.

—Déjala que siga hablando. De todas formas estoy a punto de romperle la cara —Rosalie intentaba zafarse del agarre de Emmett, pero este se negaba a soltarla. Sabía el carácter que tenía su esposa.

—No necesito decir muchas cosas acerca de ti. Si no fuera por tu belleza no tendrías nada más que fuera importante para esta familia —Aleksandra se levantó, pero Carlisle se puso frente a ella, tapándole la visión.

—¡Tú que sabes!, tú siempre has sido una inútil en esta familia. No tienes nada que aportar y mucho menos tienes alguien quien te quiera.

Esta vez Aleksandra sintió dolor. Rosalie tenía razón, ella no tenía nada que aportar, ni siquiera en aquel momento en que estaba perdiendo aquello que la inmortalidad le dio hace muchos años atrás.

Cuando el amor llegó ⟨••Caius Volturi••⟩ (REESCRIBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora