❛Chef❜ ☀️ [Rubén Doblas] // LENTA.

15; licencias y alusinaciones☀

Me dispongo a sentarme en la cama, mirando aquella puerta que se cierra al último roce de la mano de él, mis ojos siguen esas acciones, provocando que mis párpados cayeran. Mi espalda busca un soporte que le sostenga y es ahí cuando declina y hace contacto con las frazadas y el cobertor, observo el techo en silencio, buscando respuesta que ni siquiera tiene pregunta de base.

Más así, no podía evitar sentir esa pequeña felicidad que normalmente tenía una adolescente cuando escabullía a su novio a su cuarto a la vista ciega de su madre, aunque, era sólo mi jefe no pude contrarrestar sentir aquello. Su indiferencia por fin logró algo bueno a mi beneficio.

Tal vez estos días de licencia me servirán de algo o en lo peor de los casos, para nada, más ese factor sorpresa debería llegar a manifestarse de alguna forma, ya sea positivamente o negativamente. Vuelvo a dejar caer el telón en mis ojos, encontrando esa oscuridad abrasiva, mis manos abrazan mis brazos y caen sobre mi abdomen, suspiro y me dejo estar por la relajada sensación que presenciaba.

La noche en que los pillé en el estacionamiento, viene a mi mente, contando cuando me obligó a esconderme con él para que el señor Rogel no nos viera... Luego el quedarnos varados en la carretera por una falla en su vehículo.

Entonces, pasó el quiebre de una de las reglas.

Cuando nuestros labios rozaron por primera vez en un acto de calentura del señor Doblas y una acción de debilidad de mi parte, la bofetada de mi madre había incluido mucho a la mañana siguiente.

Sin embargo, yo debía renunciar a los afectos de cariño y relaciones afectuosas dentro del mismo recinto de labor en el cual fui permitida ingresar.

¿Acaso rompí mi promesa con usted señor Miguel Ángel?