Él es malas noticias!

Capítulo 10

MAX POV

—¿Max? ¿Me estás escuchando?

—¿Eh?  —Mis ojos se desvían hacia el sonido de mi nombre, proviniendo de la voz de mi madre. Ella está de pie frente mío con los brazos cruzados sobre el pecho, su ceño fruncido mientras me devuelve la mirada.

—¿Haz escuchado algo de  lo que te he estado diciendo? —pregunta ella y sonrío. Estoy sentado en una de las sillas en el comedor desde que llegué de la comisaría, inmediatamente mi madre me empezó a sermonear (al igual que siempre) pero rápidamente mi mente empezó a desviarse hacia otros lugares… como las suaves piernas de Amy.

Y desde entonces he estado pensando en ella.

Y no tengo la menor idea de por qué lo he estado haciendo.

Sólo sé que por algún motivo, algo hizo clic dentro mío cuando vi cómo el idiota de ese chico rosa envolvía uno de sus brazos alrededor de Amy. No me gustó para nada. ¿Y cuándo posó una mano sobre su trasero? Maldición, sólo oía el pulso ensordecedor en mis oídos mientras avanzaba y lo mandaba lejos de ella.

Y bueno, eso es básicamente en lo que mi mente se ha estado desviando… eso, y como me gusta cuando Amy usa polleras o shorts. Aunque aún no la he visto con shorts, pero imagino que al igual que las polleras, dejará entrever sus largas piernas y….

Mierda.

¿Ven?

Estoy pensando nuevamente en sus piernas. Algo está mal conmigo.

De un golpe me levantó del asiento y froto mi rostro, deslizando mis manos por mi cabello y desordenándolo. Empiezo a dirigirme hacia otra habitación cuando mi madre me habla:

—¿A dónde vas?

Mi cabeza gira y la miro por sobre mi hombro. Rayos, había olvidado que ella estaba ahí. Lanzo un profundo suspiro y negando con la cabeza digo:

—Voy a tomar una ducha.

Y para mi mismo agrego: “Una ducha BIEN fría”.

Salgo del baño con sólo unos shorts puestos y con mi cabello chorreando por mi torso desnudo. Coloco la toalla alrededor de mi cuello mientras me dirijo hacia mi habitación.

Nuevamente, tomo asiento en mi cama y me recuesto por la cabecera. Inclinándome hacia un costado recojo la guitarra que se encuentra al lado y la acomodo en mi regazo. Empiezo a tocar unas notas… notas que no he tocado antes y los sonidos forman una melodía… y mientras estoy concentrado en esto, me doy cuenta de que estoy realmente inspirado.

AMY POV

La mañana siguiente despierto de un considerable buen humor. Me tomo mi tiempo en arreglarme el cabello. Lo cual, da mucho de qué hablar pues por lo general, siempre lo llevo suelto, sin una pizca de broches, o trenzas o lo que sea.

Al llegar al aparcamiento del Instituto, diviso un lugar vacío y rápidamente lo ocupo. Estoy bajándome de Gema cuando mis ojos se posan en unos familiares hombros que se dirigen hacia la entrada del Colegio, subiendo las escaleras.

Sonrío.

Moviéndome rápida y silenciosamente al estilo la pantera rosa… bueno, sin todo lo rosa. Sólo al estilo de una pantera, me muevo con pasos ligeros hacia adelante y tomándolo por sorpresa salto sobre los hombros de Max.

—¡Hola! —digo alegremente en su oído. Él se queda paralizado por unos segundos y luego me mira por sobre sus hombros y sonríe lentamente.

—Hola —dice. Y por una milésima de segundo no puedo hacer más que mirarlo.