Estúpido Poeta (NOVELA TRASH)

Inesperada sorpresa

Seis meses después...

Medio año ha pasado desde que decidí ponerle fin a la relación con Jaime, literalmente no vino más a mi casa y eso me dió la oportunidad de retomar mi rumbo.

A pesar de la desdicha y la soledad, me mantuve firme en mi decisión, evitando cualquier interacción con él y centrándome en sanar las heridas de mi corazón.

Pero mientras trataba de seguir adelante, el resentimiento de mi hija hacia mí crecía cada vez más. Ella me dijo que tenía que aguantar a Jaime llorando en el patrullero mientras trabajaban y que esa situación inusual no la soportaba, sin embargo con el paso del tiempo el policía fue superando la situación.

Al principio no podía evitar sentirme culpable por el sufrimiento que estaba experimentando a causa de mi decisión de cortar todo lazo con Jaime, pero sabía en lo más profundo de mi ser que no podía permitir que el abuso continuara en mi vida.

Sin embargo, después de muchos meses recibí un mensaje inesperado que sacudió mi mundo por completo. Era de Kyd, el hombre que una vez creí que había perdido para siempre. Como yo lo tenía bloqueado, se había creado una nueva cuenta para poder escribirme.

—Rosanelda, soy Kyd y necesito contarte algo emocionante —decía el mensaje, llenándome de sorpresa.

Mis manos temblaban mientras leía sus palabras, sintiendo una mezcla de nerviosismo y emoción. ¿Qué podría ser tan emocionante  para que Kyd me lo contara a mí?

Mi corazón galopaba como un caballo y para calmarme me tomé un trago de tequila. Con las manos temblorosas, respondí a su mensaje, ansiosa por saber que quería decirme.

Y entonces, las palabras de Kyd inundaron mi pantalla, revelando una noticia que me dejó sin aliento. Él estaba viviendo en Buenos Aires, Argentina, con mi sobrina Dolores, trabajando en una empresa de chacinados, él dijo que Lo envió mensajes a todos sus contactos porque cerca de su casa necesitaban personal para trabajar full time y él decidió viajar a Buenos aires para probar suerte.

La sorpresa y la alegría me llenaron mientras leía su relato de cómo había llegado a Argentina y había encontrado trabajo en la empresa de los vecinos de Dolores. Me sentía emocionada por él, por la oportunidad que había encontrado en un nuevo país y un nuevo trabajo.

Pero una pregunta seguía rondando en mi mente y no podía aguantar no hacerla.

—Tigre, ¿tienes una relación amorosa con Dolores? —pregunté, sintiendo un ligero temor en mi corazón.

Su respuesta fue como un bálsamo para mi alma.

—Claro que no, Rosanelda. Nunca ha pasado nada entre nosotros. Solo somos amigos y colegas en la empresa de chacinados, alquilamos una casa y vivimos juntos, pero también vive con nosotros otras personas que trabajan en la empresa —aseguró, disipando mis temores y calmando mis preocupaciones.

El alivio y la felicidad llenaron mi ser mientras asimilaba la noticia. Aunque había pasado tanto tiempo desde que nos habíamos visto, el hecho de saber que Kyd estaba bien y que nuestra conexión aún estaba presente me llenaba de una alegría indescriptible.

—No me lo vas a creer, pero estuve convencida que tú tenías una relación con Lo por venganza —escribí con temor.

—No te preocupes, mucha gente pensó eso. Incluso mi familia, pero tu sobrina tiene novio hace rato... —dígitó Kyd.

—Estoy perpleja.

Y mientras seguía conversando con Kyd, sentí un rayo de esperanza iluminando mi camino. Tal vez, solo tal vez, el futuro aún guardaba algunas sorpresas para nosotros.

A medida que Kyd me contaba su historia, sentía cómo una mezcla de emociones inundaba mi corazón. Su determinación para crear un futuro mejor para sí mismo en Argentina me llenaba de admiración y orgullo, pero también sentía una punzada de preocupación por los desafíos que enfrentaba.

—Rosanelda, ha sido un camino difícil, pero finalmente estoy viendo la luz al final del túnel —dijo Kyd.

—Estoy gratamente sorprendida, prosigue...

Leí atentamente lo que él me escribía, mientras continuaba contándome sobre su trabajo en la empresa de chacinados y su lucha por obtener los permisos de trabajo en Argentina. Sabía que no era fácil, pero su determinación para perseguir sus sueños me inspiraba profundamente.

—Estoy trabajando en negro en la empresa de chacinados, pero estoy en proceso de obtener la ciudadanía argentina para que puedan ponerme en blanco. Eso significaría un aumento en mi salario y beneficios adicionales como la obra social y la posibilidad de sacar un préstamo bancario, es cuestión de terminar los trámites burocráticos que se precisa —explicó Kyd.

Me quedé impresionada por su tenacidad y dedicación para asegurar un futuro mejor para sí mismo.

—Kyd, eso es increíble. Estoy tan orgullosa de ti por todo lo que has logrado —le escribí sinceramente, sintiendo un nudo en la garganta por la emoción.

Él respondió con gratitud, sus palabras llenas de sincero agradecimiento.

—Gracias, Rosanelda. Tu apoyo significa mucho para mí —respondió.

Mientras seguía leyendo su historia, sentí una sensación de esperanza creciendo dentro de mí. Tal vez, a pesar de todos los desafíos y obstáculos que habíamos enfrentado, todavía había una pequeña y minúscula dosis de esperanza esperando por nosotros.

—Creí que nunca más volvería a hablar contigo, tigre —dije sinceramente.

—No te voy a negar que yo también lo pensé, pero sin embargo el dolor me sucumbió cuando supe que me habías cambiado por Jaime, el policía.

—Lo sé, pero teníamos profundas diferencias, y el amor nunca superó al dolor, entonces decidí ponerle fin a ese pseudo amor —escribí, mientras me servía otro trago de tequila.

—Dolores me dijo que ustedes eran novios...

—En realidad era un amigo de la familia y nunca fuimos una pareja consolidada. ¿Qué más quieres saber? —escribí abochornada.

—Te creo. Jaime no es un hombre bueno, él nunca podría escribir ni siquiera una sola poesía de amor...

Y mientras conversábamos, sentí una chispa de esperanza encendiendo una vez más en mi corazón. A pesar de las dificultades y las pruebas que habíamos enfrentado, todavía había una oportunidad para nosotros, una oportunidad para construir un futuro juntos lleno de amor, apoyo y esperanza. Y en ese momento, supe que no importaba cuánto tiempo pasara, nuestra conexión seguiría siendo tan fuerte como siempre.