47 «Deja de castigarme»

21.3K 1.6K 221
                                    

Capítulo 47

Punto de vista de Adam.

Le sonrió a Bella. Siento que podría volar sin la necesidad de alguna droga más que la felicidad. Ella rodea mi cuello con sus brazos y se alza en puntillas de pie para darme un beso.

Sujeto su cintura presionandola contra mi. Ella de un momento a otro, enreda sus piernas en mi cintura y lo que comenzó como un beso tierno y lento se convierte en uno apasional. Nuestras lenguas se pelean entre ellas.

Me siento en la cama con ella en brazos y bajo la bragueta de su vestido, ella intenta quitarme mi camisa, pero luego recuerdo lo que mis planes. Depositó besos pequeños en su boca hasta que me separo. Ella me mira confundida, sus pupilas dilatadas, sus mejillas sonrojadas. Ella pestañea mientras lame sus labios, intenta besarme otra vez, pero entonces me separo de ella.

—Quiero hacerte el amor luego de la boda por Iglesia, cuando estemos en la Luna de miel.
—Puedes hacermelo aquí también.
— Quiero que nuestra primera vez juntos, sea en la Luna de miel.
—Adam.—Súplica. Depositó un beso corto en sus labios y me desplazó en la cama con ella en mis brazos.
—Mi bella esposa.—Le digo sonriendo. Ella deposita un beso en mi mandíbula y me sonríe.
—Vale Adam, te amo aunque no quieras hacerme el amor.—Dice ella y yo río.
—Como si eso fuera posible. Sólo me intento contener. Ahora duerme, mañana nos terminamos de casar y pasado mañana estaremos en nuestra Luna de miel.

Cuándo me despierto, no me siento como debería. Tengo una pequeña opresión en el pecho. Esperaba que en nuestro primer día como marido y mujer, mi esposa despertaria a mi lado. Pero no, maldita tradición de que el marido no puede ver a la novia. Es injusto, ya estamos casados.

Me pongo de pie y me frego los ojos. Sólo con un boxer blanco camino hacia la cocina para tomar mi café diario. Suelto un grito cuando veo a Adzelene en mi cocina.

—¿Que diablos haces tu aquí? .—Pregunto furioso.
—Vine a convencerte de que no te cases. No puedes casarte Adam.
—Pues es tarde. Ya estoy casado. Por favor, vete de mi casa antes que llame a la policía.
—Ya basta Adam. Comprendo que me porte mal contigo, que te hice daño. Lo lamento, por favor, ya no me castigues más.

Me la quedo mirando por sus palabras. ¿Yo castigarla? Esto debe ser una jodida broma. Sin poder evitarlo suelto una carcajada. Esta mujer se ha vuelto loca.

— Mira, me hiciste daño, me humillaste e intentaste hacerme quedar mal ante mis fans. Eso logró que todo el amor que te tenía se transforme en indiferencia. Ya no te amo, ya no te quiero Adzelene. Encontré a una mujer que me hace completamente feliz y me vuelve loco. Soy feliz con ella y la amo con cada maldita fibra de mi ser. Así que no te entrometas más en mi vida. No arruines este día. Ahora, vete.

Miro nuevamente su rostro, lágrimas caen por el. Frunzo el ceño. ¿A caso lo hace a propósito?

—Tu y yo nos vamos amar siempre, Adam.—Me dice y ahora temo que me asesine. Se que su locura no llegará a tal grado. Eso espero.
—No, eso no sucederá porque amo a Bella y por eso nos hemos casado ayer.

Tomo el teléfono y hago de cuenta que marcó el número de la policía. Ella abre mucho sus ojos y sale de mi cocina. Pocos segundos después escuchó la puerta cerrarse y sonrió.

Mirando el teléfono en mi mano decido marcarle a Bella. Es posible que afuera de mi casa haya fotógrafos y lo último que deseo es que fotos de Adzelene saliendo de mi casa se filtren.

—¿Hola?.—Dice su envidiosa voz.
—Hola mi amorcito.—Le respondo sonriendo. Ella ríe.
—¿Cómo está mi amado esposo?
—Molesto por no haber despertado al lado de mi mujer en nuestro primer día de casados y ansioso por verla caminar hacia mi en el altar. ¿Cómo estás tú, mi niña?
—Rogando a que sea la hora así verte.
—Preciosa, te lo diré yo antes que te enteres por otro lado. Cuándo desperté Adzelene estaba en casa, no se cuanto tiempo estuvo, pero no pasó absolutamente nada.
—Se que no pasó nada Adam. Confío en que me amas como yo a ti.
—Te amo mucho más.

El timbre de la casa suena y yo bufo. Escuchó como a ella le dicen algo y mi mujer se ríe.

—Amor, creo que llegaron los chicos. Te dejó terminar de producirte.
—Vale. A mi me andan regañando por hablar contigo.—Me dice y yo río.
—Vale. Te amo. Te espero en el altar.
—Seré la que va vestida de blanco con una sonrisa partiendo mi rostro en dos.
—Y yo seré el hombre que te verá como si viera mi mundo.
—Oh.—Dice ella y yo río.
—Si, oh. Te amo, hablamos luego.
—Si mi amor.—Me dice antes de colgar.

Con una sonrisa de estúpido enamorado, camino hacia la puerta de mi casa y si, ahí están mis amigos, el hermano de mi novia y su padre. Busco a mi padre con la mirada u sonrió cuando lo encuentro.

Cada uno se adentra a mi casa me da un abrazo. El hermano de mi novia me mira de arriba abajo y niega con la cabeza.

—Tu bastardo te casas con mi hermana. Así que si haces algo mal no me importa que tus millones de fans quieran patear mi trasero o que seas multimillonario y luego mandes a unos matones. Pero si las tomas a mi hermana, yo mismo te pateo el culo.
—Olvida lo de los matones. Si yo llego a lastimar a tu hermana, apuntó mi culo a tu dirección así me lo pateas.
—Bien Adam, estás por formar parte de la familia.—Me dice su padre y sonríe.—Gracias por mantener a nuestra hija con nosotros. Pensé que cuando perdió el bebé...que ella se iría con el. Que nunca volveríamos a ver a la Bella feliz. Tu hiciste que ella vuelva. Siempre estaré agradecido contigo, hijo.
—Su hija merece cosas buenas. Yo la amo y le daré lo mejor del mundo. Lo prometo.
—Confío en ti muchacho.

······

Observó nervioso el reloj, Isabella debería haber llegado hace media hora. Miro a Kyler que intenta volver a comunicarse con ella pero no es posible.

—¿Se hará la boda?.—Pregunta el sacerdote. Yo muerdo mi mejilla interna.
—Dame un momento más, por favor. Capaz se olvidaron algo y debieron volver.
—Diez minutos más.—Me dice el y yo le sonrió agradecido.

Alguien toca mi espalda y yo me volteo para ver a mi padre. El pone un brazo sobre mis hombros.

—Hijo, la boda no se podrá llevar a cabo.—Me informa y siento mi corazón detenerse. Bella no pudo haber cambiado de opinión. Ya estamos casados.
—¿Qué? Bella no haría algo así papá.
—Me acabo de poder comunicar con tu madre, están en la clínica. Tuvieron un accidente. Bella estuvo afectada.

Y es así como toda mi ilusión se desmorona. Mi esposa no podía volver a estar internada. No podía estar en riesgo de perderla, otra vez.

Hola jejejjejejejejej, ¿Pensaron que el drama había acabado? Pues.... No es así. Pobre Adam, plantado en el altar.
Bella internada...
¿Y adzelene? I dont know.
¿Qué pasará? Todo eso y mucho más en el próximo capítulo que aún no subiré.

Gracias por leer. Saquen conclusiones, quiero leerlas.

Juls x

Strong [The King. 1/4] Borrador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora