See the light (MARKSON)

10. La primera risa

Jackson justamente había entrado en el comedor cuando la bandeja de Mark caía al suelo, miró la escena y luego se acercó a él. Algunos trabajadores se encargaron de recoger todo del suelo y de darle otra bandeja al americano.

-¿Qué ha pasado? –preguntó el chino.

-Nada, se me ha caído.

Mentía, pero no quería que su rabia aumentara así que prefirió callarse y volver a echarse la comida. Al menor le sentó mal que le dijera eso, sentía que no confiaba en él pero no quiso insistir, sabía que no iba a contarle la verdad aunque preguntase de nuevo.

Se sentaron juntos a desayunar de nuevo con esos silencios incómodos, Jackson estaba algo molesto y el otro enfadado aunque no con él. Se despidieron con un simple adiós y luego fueron a entrenar cada uno por su lado. No tenían peleas ni combates, solo mantenimiento para no cansarse los del equipo de esgrima. Era día 8 y Jackson tenía que competir al día siguiente así que el entrenamiento debía ser algo más relajado. Por su parte Mark con su selección tuvo entrenamiento normal, por lo que no coincidieron ni en la misma sala.

Terminó la primera jornada de entrenamiento y fueron a los vestuarios, de nuevo coincidió con los coreanos y claramente el menor de ellos venía a molestarle otra vez.

-Yugyeom, para –dijo JB antes de que nada malo ocurriera.

En ese momento apareció Jackson por detrás y abrazó a Mark. Al principio no sabía quién era así que miró hacia atrás y al darse cuenta de que era el chino, no pudo negarse a que siguiera rodeándolo con sus brazos.

-Vamos a ducharnos –le dijo el otro y se lo llevó de allí.

Yugyeom estaba molesto de que el otro coreano siempre defendiera a Mark, le sacaba de quicio y hacía que cada vez lo odiara más, todo por celos, aunque sabía que había algo malo detrás para que JB también le tuviera cierto rencor o eso era lo que pensaba él.

Tras la ducha fueron a comer juntos. Mark sabía que los de su selección estaban en otra mesa y a veces hablaban de ellos porque los estaban mirando, le hacía sentir incómodo ya que pensarían lo que no era. Estaba más pendiente de ellos que de Jackson que se dedicó a comer sin decir ni una palabra ya que seguía molesto de que el mayor no confiara en él cuando pensaba que le había demostrado varias veces que sí.

Terminaron, el chino había comido bastante y Mark apenas había removido la comida, no tenía mucha hambre. Salieron de allí y el menor le preguntó si quería salir a pasear con él hasta la hora de entrenar y el otro aceptó aunque lo pensó un momento, luego tendría muchas cosas que aclarar.

-Luego no entrenaré, tengo una reunión –comentó Jackson saliendo de las instalaciones, nadie le había preguntado pero quería entablar algo de conversación.

-Mm... ¿Por mañana?

-Sí... ¿Cómo sabes lo de mañana? –preguntó Jackson algo sorprendido.

Mark se quedó callado, sabía cuándo tenía que competir el menor pero porque lo había buscado adrede en internet.

-Ehm pues... hoy competía corea y me dio curiosidad por saber quién competía mañana.

-¿Y qué más te da quién compita en Corea?

Lo cierto era que le daba exactamente lo mismo, si le importaba alguna selección era la estadounidense y no el país de su ex.

-Pues... Porque si perdía Corea podría... alegrarme.

-Eres raro.

Mark se había quedado sin argumentos por lo que siguieron caminando, a la sombra eso sí ya que a esas horas hacía bastante calor.