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ZAYN'S POV.
Estaba parado frente a la que hasta hace un día había sido la oficina de mi mejor amiga. Ahora estaba siendo ocupada por Katherine, la terrible mujer a la que ahora todos debíamos rendirle cuentas de una forma u otra. Ella no debía estar ahí. Ahí debía estar Lauren. Detrás de esa puerta debería estar ella haciendo su trabajo como todos los días. Allí es donde yo debería entrar sin tocar para luego escucharla regañarme por mi falta de modales. Ahí debería estar ella. Pero no está. Ya no lo estaría.
Una opresión se instaló en mi pecho al recordar cómo me habían dicho que se había ido. Así, sin más. Sin aviso. Sin nada. Y quizás debería estar molesto. Pero sería imposible para mi estarlo. Porque quizás yo pude haber hecho algo para detenerla. Pero no lo hice.
– FLASCHBACK –
Ariana llevaba rato paseándose por toda la habitación con una bata roja tan diminuta que definitivamente no dejaba mucho a la imaginación. Y yo ya comenzaba a desesperarme. Había sido un día largo y yo en serio necesitaba relajarme.
– Pareces... – Comenzó a decir mi novia al tiempo que se sentaba encima de mi en la cama y jugaba con la tira de la bata. – Un poco estresado. –
– Estoy muy estresado. – Dije casi en un hilo de voz. Me ponía demasiado vestida así.
– Vaya, creo que tendremos que resolver eso. – Susurró ella al tiempo que yo atrapa sus labios con los míos y comenzaba a desatarle el nudo para abrir la bata y ver que llevaba un conjunto color negro. Dios mío, iba a matarme.
Ariana me quitó la camisa y yo me deshice rapidamente de los pantalones para quedar ambos en igualdad de condiciones sin dejar de besarnos. Justo cuando estaba punto de desabrochar su sujetador, mi teléfono comenzó a sonar. Gruñí de frustración y me acerqué a él para ver que era Lauren quien llamaba. Dudé si contestar ya que últimamente mi mejor amiga no se encontraba del todo bien, pero tener a Ariana encima de mi besándome el cuello, me ponía las cosas difíciles.
– Amor, sólo será un momento. Sabes que Lauren nunca llama si no es nada importante. – Le dije al oído escuchando cómo gruñía y se me quitaba de encima. Suspiré de frustración y me dispuse a contestar rápido. Era mi mejor amiga y la amaba pero aún así estaba arruinando mi momento.
– Dime Laurenza, estoy un poco ocupado ahora. – Le dije apenas descolgué.
– Zayn, es que necesito hablar contigo. – Escuché que decía lentamente pero ciertamente no le presté atención ya que Ariana comenzó a besarme el cuello sin piedad.
– Lau, estoy seguro de que puede esperar hasta mañana, ahora estoy muy ocupado. – Le respondí como pude al sentir la lengua de mi novia bajar por mis clavículas.
