Love Only; Camren.

Capitulo 40.

LAUREN'S POV.

LONDRES, INGLATERRA.

Y aquí estaba de nuevo, en el lugar donde de alguna manera todo comenzó. Había llegado ayer de París luego de que la exposición de mis fotografías acabara y de que Camila dejara todo en orden en la obra para poder irse. Me había costado convencerla para que me acompañara a Londres pero al final terminó aceptando luego de muchos mimos, y mucha pizza por supuesto.

Camila tenía razón, yo de alguna manera tenía mi vida aquí en Londres. A fin de cuentas, muchas cosas las conseguí estando aquí. Pero por muchas oportunidades que me hubiese podido traer, en realidad mi vida era Camila. Desde que la encontré me di cuenta de que había pasado tanto tiempo buscando mi vida, tratando de encontrar lo que yo creí perdido en Miami, sin saber que en realidad, mi vida era ella. Y si, puede que en realidad haya tomado una decisión apresurada con todo esto. Pero, yo ya tenía una maestría en tomar decisiones así, ¿no es cierto?

Camila y yo nos hospedamos en un hotel cerca del estudio de Alexa porque Camila no quería por ningún motivo quedarse en su casa. Y yo, como una estúpida enamorada y loca por ella, acepté quedarme con ella. Hoy debíamos ir al estudio ya que con Alexa había acordado que éste sería mi último día de trabajo allí. Ella ya estaba al tanto de la situación, como no, y aunque no estuviera del todo de acuerdo con mi renuncia, estaba feliz por mí. Así que con Camila recorrimos algunas calles londinenses de camino al estudio. La castaña estaba anonadada con el estilo arquitectónico y el ambiente, y yo estaba anonadada de lo mucho que me gustaba verla.

Llegamos al estudio y como de costumbre, no había pisado aún la puerta de éste cuando ya se oían los gritos de Alexa por todo el piso. Camila se exaltó al escucharla y tomó mi mano más fuertemente totalmente asustada, lo que provocó mi risa.

– No te preocupes Camz, Alexa es muy gritona pero a ti no te hará nada. – Camila me miró con ojitos asustados y yo besé su nariz para intentar tranquilizarla al tiempo que entrábamos al estudio y veíamos a un montón de modelos correr de un lugar a otro al igual que los maquillistas y a Alexa gritar improperios desde la escalera.

La mirada de la modelo cayó sobre nosotras al instante y como un rayo bajó las escaleras y corrió a abrazarme como si llevara años sin verme, cuando en realidad fueron sólo unas semanas.

– ¡Volviste! – Gritó en mi oído sin dejar de abrazarme.

– Claro que volví idiota, te lo dije ayer. – Respondí soltándome de su agarre y esbozando una sonrisa.

– Bueno si pero tenía que verlo para creerlo cariño, no olvides que tienes historial. – Rodé los ojos en respuesta lo que me consiguió un golpe en el brazo de su parte. Miré detrás de mí viendo a Camila retorcerse las manos con nerviosismo y mirándonos tímidamente. Alargué mi mano tomando la suya para atraerla hacia mi y dejé un beso en su frente que la hizo sonreír.

– Alexa, ella es Camila, mi novia. – Dije sonriente y saboreando las palabras en mi boca. Dios, había extrañado como se sentía eso.

Camila extendió su mano con una sonrisa boba en sus labios al escucharme pero Alexa simplemente ignoró su mano y la abrazó contra ella fuertemente haciendo que mi novia abriera los ojos como platos y me mirara confundida y sin saber qué hacer.

– Hasta que al fin conozco a la famosa Camila. – Dijo Alexa soltándola y mirándonos a ambas. – Comencé a pensar que eras el personaje de alguna serie o un libro por lo mucho que Lauren hablaba de ti. Era muy molesta. – La fulminé con la mirada lo que provocó las risas de ambas pero a mi eso no me hacia gracia. – Me alegro de que se encontraran, ya había perdido la esperanza de que ésta mujer no terminara soltera y con veinte gatos por el resto de su vida. –