Llegamos

355 31 1
                                    

Luego de un largo viaje de casi 3 horas llegamos al lugar donde sería la famosa acampada, salimos todos del autobús muy contentos. Era un lugar hermoso, estábamos prácticamente en un bosque. Habían árboles de varios tamaños, mariposas, mosquitos e infinidad de bichos raros. Fuimos adentrandonos más al bosque y encontré algunas cabañas abandonadas, más adelante estaba el 3er y 4to grupo ellos habían llegado antes y ya se habían instalado con sus tiendas y pertenencias, nosotros teníamos que caminar un poco más. Era agotador, aunque habíamos descansado en el camino me sentía cansada de todas formas. Nuestro supervisor nos indicaba las normas que hay que cumplir en una acampada y la más importante era: No separarse del grupo. Y ¿Adivinen que? Si señores.


-¡Vamos Hanna! Te quedarás atrás si no te apuras__decía Kathe más adelantada que yo.

Trataba de avanzar lo más rápido pero mis piernas era muy pequeñas que no daban pasos largos y además estaba tan emocionada admirando la naturaleza.


-¡Gracias por esperarme mejor amiga! __Dije sarcástica a Kathe mientras veía como se alejaba de mi con Julen.



Seguí caminando, casi ya no veía al grupo, entonces empecé a acelerar el paso pero ya no estaban. ¡Me perdí! __decía entre mi__ pero era imposible no estaba tan atrás.



Escuché ruidos



-¿Qué fue eso?__Sonaba como si alguien se estuviera escondiendo tras los grandes arbustos del bosque__está bien Hanna, tranquilizate sólo es el viento__trate de calmarme y seguir avanzando, no tenía mas opción.





De nuevo

Esta vez voltee y por el rabillo del ojo pude ver una silueta esconderse detrás de los árboles.




-Hanna, no pasa nada__seguí caminando más rapido, empecé a asustarme. Cada vez ese ruido se iba haciendo mas notorio y podía sentir a alguien detrás mío.



Entonces escuché nuevamente y esta vez sí pude ver a una persona que se escondía atrás de los árboles.




Sólo pensé una cosa: Hombre + bosque = Matanza en Texas.







¡Virgen María y todos los ángeles! Sé que no me he portado bien pero por favor no dejes que me coman Dios





Salí corriendo tropezandome con todo lo que había en mi camino y empecé a gritar desquisiadamente para que alguien me escuchara, entonces alguien me estaba siguiendo. Seguí corriendo, tratando de esconderme de aquel sujeto. No pude reconocerlo pero juro que no era ni Mathew ni Julen ni Kathe ni nadie. __¡Ayuda!__gritaba al aire, nadie me escuchaba esa persona se estaba acercando, iba a morir asesinada. Entonces al final del bosque visualice un barranco__¿Dónde rayos estoy?__Empecé a pensar que de tanto correr había llegado al final del bosque. Entonces lo vi. Era un hombre, llevaba algo en su rostro que no me dejaba ver quien era. Tenia ropa vieja, parecia vivir ahi.__¿Es en serio?__crei que esto sólo pasaban en películas__Por favor no me lastimes__Murmure. El sólo me veía__Parece que la niña bonita se perdió__decía el hombre y se iba acercando un poco mas a mi.


No tenía más opciones que saltar el barranco, era un gran barranco y al final sólo había tierra. Pero no pensé; ese sujeto se estaba acercando. Cerré los ojos.


Uno, dos, tres!!


Pero alguien me atrapó y me tapó la boca.


-Shh__No hagas ruido.

Mi vecino es un espíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora