[ Mess ] [ kino ] ptg

O5

-¿No te ibas a quedar a hacerme compañía? -digo con una risa burlona y posando mi mano en mi cintura.

-Yah. ¿Cuánto más te va a durar la bromita? -giró su cara para no verme a los ojos. -Es un problema normal -se defiende.

-Estoy de broma -alzo las manos en señal de paz y muevo las maletas de mi sala a mi habitación. Al empezar el viaje no llevé más que una maleta, pero ahora regresé con puras tonterías.

Un peluche que se parece a Wooseok, un conejo rosa como YanAn, unas camisas de telas tradicionales que Kino se esmeró en que me probara y comprara.

-Además no es por eso, Han quiere que la pase a recoger del trabajo -se encoje de hombros

-¿Ya novios oficiales?

-Ni de chiste, pero posiblemente.

Rodé los ojos. -¿Me sigue odiando?

-Con su alma entera. -reí

-¡Perfecto! -me tiro a la cama rebotando un poco- Mi trabajo como mejor amiga está hecho. -le guiño un ojo de la forma menos sexy que puede alguien imaginar.

-¿Cuándo te vas a llevar bien con alguna chica que esté conmigo? -pregunta sentándose.

-¿Y mis exs?

-Eran tarados, debes aceptarlo.

-Bueno, es lo mismo. Tus conquistas deben entender que soy más importante que ellas -me apoyo en los codos y lo miro a la cara.

-Tus conquistas deben saber que no los vas a querer más que a mi. -se apoya en una mano, me mira de lado y sonríe con arrogancia.

Si de egos hablamos nosotros podemos competir por siempre.

-Soy más linda que Han -me veo las uñas con falso interés.

-Soy mejor que todos tus exs juntos -se pasa una mano por el cabello y me saca la lengua.

Niego con la cabeza y se pone de pie. -Me voy, te veo mañana.

-Whatever -le digo y sale de la habitación y posteriormente del departamento; ya conoce el camino, ¿para qué levantarme?

●

Duermo básicamente hasta el día siguiente y pude haber dormido más, de no ser por los golpes de mi puerta.

-¿Qué mierda? -pregunto al Kino enfadado en mi puerta.

Mi aspecto es un asco, pijama que apenas cambié en la noche, cabello despeinada y con solo una pantufla.

-¡Me dejó! -voy a la cocina por mi desayuno-almuerzo a las dos de la tarde. -Me dijo que no podía estar conmigo si no era una relación. ¡Já! La conocí hace dos semanas, ¿me dejó de una relación que nunca comencé? Por favor.

-Y entonces, ¿por qué tan afectado? ¿Por qué el alboroto en mi puerta?

Me siento con tranquilidad y espero su drama con un tazon de leche y un cereal que sabrá dios aun esté a tiempo de consumir.

-¿Por qué? ¡Porque soy yo! Nadie puede solo dejarme si no he pedido una relación. Además, asume tu culpa.

-¿Perdón? ¿Yo qué?

-No me creyó que fuimos por trabajo, me citó para "dejarme" -hace comillas con los dedos y se roba mi tazón.

-Yah. -me quejo de su falta de educación ante mi ayuno de más de veinte horas.- Agh, bueno mi culpa no es que sea una celosa de mierda. Kino, dame el tazón, el hambre me da mal carácter. -toma una nueva cucharada y mejor me consigo otro tazón.