25# Simplemente corsé y medias de rejilla.

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Realmente me arrepentí al instante en el que pise aquella vivienda. Una chica me acompaño hasta una habitación, me arrebató mi teléfono y me cito a las doce de la noche en el vestíbulo.

Baje a la hora acordada y tenía mucho miedo. Entonces la misma chica me entrego la ropa y me ordenó ponérmela . No entendía en qué consistía ese trabajo hasta que  ví tan solo un corsé y unas medias de rejilla, era repugnante.

¡Tenía que huir joder! , ya había descubierto el negocio de Mery. Si no conseguía escapar seria una esclava más.

Decidí buscar alguna ventana en la habitación que me habían asignado y estaba en lo cierto, pero la cubrían unos barrotes de hierro. Esa opción era imposible, necesitaba recuperar mi teléfono móvil.

Tenía que calmarme y pensar con claridad. Sabía que aquella chica tenía mi teléfono, solo debía encontrar su habitación.

Salí a cumplir mi propósito, cuando me tope con ella y me ordenó ir a su habitación. Pensé que sería una oportunidad para encontrar el móvil, pero también pensé en lo que me esperaba en aquella habitación.

Cuando entré había un hombre sucio y asqueroso en la  cama , con  gestos groseros me ordenó que me acercará. Tuve que hacerlo y cuando se dispuso a quitarme la ropa, le deje inconsciente de un golpe seco.

Todo esto tiene una explicación y es que llevo diez años asistiendo a clase de defensa personal. Siempre piensas que a ti no te va a pasar nada  y que tendrás cuidado para evitarlo, pero cada día hay una horrible noticia y una víctima más que podrías ser tu.

Enseguida rebusque entre los objetos de la habitación y no estaba en ninguna parte , me estaba desquiciando . Justo en ese momento llamaron a la puerta y escuche el acento peculiar de aquella chica pidiéndome explicaciones, ya que había excedido el tiempo  con el cliente.

Improvise - Señora me ha pagado el doble, quiere más tiempo.

Su risa respondió por ella, pero al cabo de un tiempo volvió y me exigió que saliera. Me comunico que debía estar lista para otro cliente en diez minutos.

Estaba empezando a ponerme nerviosa no tenia escapatoria, si salía verían al cliente inconsciente y yo sufriría las consecuencias. Finalmente llamé a la chica y vio al hombre en la cama, no podía hacer otra cosa.

Sus ojos se agrandaron y me miro fijamente - ¿Que ha sucedido?

Tartamudee - Es un hombre mayor, se desmayo casi al final del acto.

Me miro furiosa y arrugó su nariz puntiaguda - Dame todo el dinero, haber si es verdad que te pago el doble. Si me mientes morirás así funcionan las cosas. Tuve que darle mi dinero para no levantar sospechas.

A continuación llegaron unos guardias y sacaron  a la calle a aquel viejo, lo dejaron tirado en el oscuro callejón.

Volví a la habitación a encontrarme con mi segundo cliente y al ver quien  era me quede perpleja.

El enigma de MelodyTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon