HANA, EL REGRESO

CAPITULO 64 BIENVENIDO ISKANDER

Ashraf sentía que ya no se soportaba así mismo, sabia que estaba actuado mal, primero con su mujer, la había despreciado, acusado de muchas cosas y ahora hasta se había enemistado con su gran amigo.

Ya habían pasado tres semanas desde aquella discusión y recordó aquella advertencia dicha por Murat sobre su vida lo llenaba de mas aprehensión "Hana dice la verdad y espero no sea tarde cuando la descubras".

Podía estar equivocado, pero como si todas las pruebas estaban sobre la mesa, ni siquiera ella había negado dormir con el, pero dijo: que la violo y que tan cierto era eso. Tal vez era el momento de confrontar a Vincent y pedirle cuentas, pero si no lo había hecho, primero: era por amor a Rosee y segundo: porque temía que si Vincent se enteraba que Hana iba a tener un hijo suyo, viniera a buscarla y se la llevaría tanto a ella como a su bebe. Ese era su mas grande temor.

Por eso no quería encariñarse con ese niño, porque siempre viviría con el temor si llegaba a amarlo, que lo quitaran de su lado.

Pero no era cierto de lo que Hana lo acusaba, el jamás le deseo la muerte, sabia lo importante que era para Hana poder lograr este hijo. Era una madre que amaba a su hijo sin importar como fue concebido.

Respiro profundo y decidió volver a su casa, a la cual seguía llegando tarde, porque no soportaba dormir en otra habitación con Hana tan cerca de el, y no poder no dormir junto a ella, como antes, abrazarla, que ella recostara su cabeza sobre su pecho y dar gracias a Allah como lo hacia todas esas noches de tenerla junto a el.

Hana se despertó en la madrugada cuando un fuerte dolor la sobrepaso, espero un momento pero esta se repitió y otro mas, cada vez mas seguido. Estaba sola y quería gritar pero el dolor se lo impedía. Como pudo, salió de la cama, necesitaba buscar a Ashraf.

Ashraf no había podido dormir, estaba sentado en la cama, cuando la puerta se abrió de improviso y entro Hana con la cara pálida y el presintió algo malo.

Fue hasta ella y le pregunto preocupado

- Que te pasa Hana, ¿dime?

- Creo que el bebe va a nacer Ashraf- le dijo con lagrimas en los ojos- y no puede nacer, esta muy chiquito aun.

- Tranquila, te llevare al hospital y te prometo que nada les pasara.

Cuando iban en el auto, Hana le suplico entre lagrimas

- Por favor Ashraf, si tienes que elegir entre mi bebe y yo, por favor eligelo a el.

- Por Allah que dices,- le reclamo abrumado- eso no va a pasar- le aseguro con angustia. Pensar en perderla a ella o al bebe lo sobrepasaba.

Ella ante su silencio le repitió

- Elige a nuestro hijo por favor, promételo.

Pero el no respondió a esa pregunta.

- Pronto llegaremos y todo va a estar bien.- le reitero tomando la mano de ella entre la suya.

Llegaron al hospital, pero antes de bajar ella le reitero.

- Si me eliges a mi jamás te lo perdonare.

Un camillero con una silla de ruedas se acerco y todo paso tan rápido, Hana fue llevada a la emergencia y a los pocos minutos le informaron que estaba en trabajo de parto. Pero en vista de no tener el tiempo completo de gestación, le practicarían una cesárea de emergencia.

- No puede ser, solo tiene 7 meses, que va a pasar con el bebe, se salvara- le pregunto al Medico.

- La situación es muy complicada, por eso necesito preguntarle en caso de tener que decidir entre la vida de su esposa y su hijo a quien elegiría.

Ashraf nunca pensó que realmente podría estar en esta situación, porque si la elegía a ella, Hana jamás se lo perdonaría.

Siempre pensaría que lo hizo por venganza, pero solo el sabia que no era asi, aun si existiera la posibilidad que el fuera su hijo, la elegiría a ella y por eso se consieraba un desgraciado pero no tenia otra opción.

- Salvela a ella Dr.-le suplico-

El medico al ver su angustia, poso su mano sobre su hombro y en tono conciliador le dijo

- Haremos todo lo posible por salvarlos a los dos.

El medico se fue y Ashraf entonces vivió los minutos mas angustiantes de su vida, en espera de que salieran a darles noticias, aunque también tenia miedo de oírlas.

En su desespero llamo a su tío Mirall y le dijo:

- Tuve que elegir entre ella y el bebe y no se que va a ser de mi, si su hijo no sobrevive, me va a odiar.

Su tío le profirió palabras consoladoras y le dijo que estaría allí en un rato.

Luego recibió la llamada de Ayla angustiada y antes de que el pudiera decirle algo, le dijo que también iría para el hospital.

Ayla apareció acompañada de Mesut y de Zahida, también llego Zully casi llorando y su Tio Mirall, con Elif.

Ashraf se abrazo a su tío y descargo todo su dolor y angustia en el.

- Tío nos se que haré si la pierdo a ella o al bebe, necesito que los dos estén bien.

- Lo estarán hijo mio, lo estarán.

Finalmente el Medico apareció y nadie se atrevía a preguntarle nada.

Así que el medico tomo la iniciativa al decir.

- Se salvaron los dos

Hubo gritos de alegría de parte de Ayla y Zully que se abrazaron emocionada, lo mismo paso con Zahida que se resguardo en los brazos de su esposo y Elif aprovecho para acercarse a Ashraf y tomarlo de la mano en señal de apoyo, lo cierto, es que estaba sumamente molesta que Hana y su hijo se salvaran.

- Aunque debo informar que aun no ha pasado todo el peligro para el bebe, deberá ir a cuidados neonatales y estar en una incubadora. Pero ya es un valiente, y es un milagro de Dios.

Todos acordaron lo mismo, le dieron cada uno internamente gracias a Allah y especialmente Ashraf.

Dicen que cada vez que un nuevo ser viene a este mundo, es una nueva oportunidad que se presenta de hacer las cosas mejor,una esperanza que se abre en el horizonte, un motivo para reír y sentir que la vida aun con sus vicisitudes vale la pena vivirla, que el mundo es inmenso pero mas inmenso es el amor que se puede alojar en cada corazón.

Ashraf veía a ese pequeño niño indefenso, en aquella incubadora y sentía que el corazón le dolía mucho. Deseaba que viviera con intensidad porque sin saber porque de manera inexplicable y fuera de toda lógica humana, lo amaba.

Y amaba a Hana mas que nada en su vida y era el tiempo de dejar el pasado atrás y empezar de nuevo.