Capítulo 7. Amistad

11.2K 867 12
                                    

Marinette

- ¿Quieres que después del trabajo vallamos por un helado? - le pregunto a Louis, quien camina a mi lado tomado de mi mano.

- ¡Sí! - grita con emoción, Saltando en su lugar. - ¿Podemos pedidle al títo Elliot que nos acompañe? ¿Si? Mami, di que sí... ¿Sí?

Lo miro asombrada, preguntándome a qué viene eso de "Tío".

Elliot es mi jefe en la agencia de modelos.
Trabajé como modelo durante algunos meses en lo que terminaba mi carrera como diseñadora.
Cuando lo hice, Elliot no dudó en darme trabajo.
Me convertí en una parte importante de la empresa, incluso tengo mis propias tiendas al rededor del mundo.
Y todo se lo debo a Elliot.

Me sorprende que ninguno de mis familiares haya visto mi cara pegada en cientos de revistas.

- ¡Hey! ¡Marinette! ¿Cómo has estado? - Dice Elliot, estrechando mi cuerpo entre sus brazos.

- Bien... Gracias.

- Hola amiguito... ¿Quieres jugar? - pregunta hincándose de rodillas frente a Louis.

- ¡Sí!

- ¡Entonces Vamos!

Elliot y Louis corren en dirección a la sala de niños, dónde lo he estado dejando todo éste tiempo antes de decirle a Alya sobre él.

=Hace Un año=

La niñera se acababa de ir, Louis se encontraba dormido en su cuna.

Y yo, sentada en el sofá de la sala, mirando a Nadja y a Chat, haciendo una entrevista.
Preguntaban de mí, de por qué ya no aparecía.
El último villano que había aterrado a París, de suerte logró volver a la normalidad por su cuenta. Por que sin mi miraculous, todo hubiera sido un desastre.

Me preguntaba a mi misma qué había pasado con ellos, si alguien ya ha tirado o remodelado mi habitación.

Ya no valía la pena pensar en ello.

Adrien o Chat, se habían casado hace poco menos de dos años y se les veía felices.

Todos habían hecho su vida nuevamente.
Sin siquiera acordarse de mí.

Aunque... Creo que me lo merezco.
Fui una tonta.

Lloraba desconsolada.
No había nadie a quien le importara lo suficiente como para apoyarme, para aconsejarme.
Revisé el Ladyblog de Alya.

¿Y a dónde se fue Ladybug?

Decía en el encabezado.

Tomé mi teléfono, decidida.

- ¿Hola? - contestó al otro lado.

Guardé silencio, más llanto llegó a mí.

- ¿Quién habla?

- ¿A-Alya? - susurré, entre sollozos.

- ¿Marinette? ¿Ma-Marinette? ¿E-eres tú? ¡Oh dios! ¡Dios! ¿Estás bien? Yo... Yo... - siento como su voz se corta, está llorando.

- Si, Alya, soy yo... Marinette.

- ¡Jesus! Debo decirle a tu madre, ella... Ella está muy mal... Yo...

- ¿Podrías venir? Sola, por favor. Te enviaré la dirección por E-mail. Y no le digas a Nadie sobre mí, aún no es tiempo. Te espero.

Corté la llamada y de inmediato envié la dirección, confiando plenamente en Alya.

Minutos más tarde llegó, la invité a sentarse y le serví té.

Ella aún se veía igual, el mismo corte el mismo estilo de tinte.
Sus lentes aún estaban allí, y sus ojos verdes no habían cambiado nada.

El mismo afecto de hace años se encontraba en ellos.

Vestía un suéter naranja y rojo, y unos jeans celestes.

- ¿Cómo has estado? - pregunta, conteniendo las ganas de llorar.

- Bien... Yo... Debo decirte algo. - susurro. Muerdo mi labio inferior, insegura.

- ¿Te pasó algo? ¿Por qué te fuiste de tu casa sin decirle a nadie? ¿Alguien te amenazó o algo? - Preguntó Alya, poniéndose de pie y tomando mis hombros, mirando fijamente mis ojos.

- Luego te explicaré eso... Yo... Ven, sigueme.

Alya me acompaña hasta el cuarto de Louis.
Al entrar, me dirijo hasta su cuna y lo cargo en mis brazos.
Él aún está dormido.

- ¿E-es... Él es...?

- Es mi hijo. Se llama Louis. - dije, poniéndolo en los brazos de Alya.

- ¿Y el padre? - preguntó sin despegar su mirada de mi bebé.

- El padre es... Es... - respiro hondo, lista para soltarlo por fin. - El padre de Louis es Adrien... Adrien Agreste.

Los ojos de Alya se abren de par en par, sorprendida.

Las lágrimas llegan nuevamente a mí, ella deja a Louis en su cuna y me abraza.
Ese abrazo que he necesitado desde hace tanto tiempo.

No lo sabrá Jamás (Marichat, Adrinette) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora