I M A G I N A S. #2 [EDITANDO]

The Vampire Diaries Imagina. (Kai) #2

Doy vueltas sobre mi misma.

Estoy en Mystic Falls, o al menos en una versión en la que no hay ni Dios, literalmente.

Me cruzo de brazos y miro hacia la tienda de comida. Entro sin preocuparme por hacer ruido, al fin y al cabo estoy sola.

Me paseo por los pasillos. Cojo una bolsa de palomitas y la abro mientras continúo inspeccionando el lugar. Me paro delante de la sección de bebidas.

—Bourbon. —Digo cogiendo la botella. — Veamos porque le gustas tanto a Damon.

Intento abrirla pero no lo consigo, después de varios intentos, me canso y lanzo la botella contra una pared.

—¡Estúpido Damon y estúpido bourbon! —Grito enfadada.

Si no fuera por Damon, yo no estaría aquí. Se cree que él es mejor que yo, cuando en realidad él ha hecho más daño y probablemente haya matado a más personas que yo en un año.

—Menos mal que esto mañana estará como te lo has encontrado. —Oigo decir a alguien.

Busco al dueño de esa voz pero no veo a nadie.

—Genial, no llevo ni media hora aquí y ya oigo voces. —Susurro, aunque estoy alerta.

—Por aquí. —Vuelvo a oír la misma voz.

Cojo otra botella de bourbon y cuando giro hacia mi derecha, la lanzo. El chico que está de pie se aparta, esquivándola fácilmente.

—¿Quién eres? —Pregunto cogiendo otra botella.

—Kai. —Me contesta.

Espero a que diga algo más pero no lo hace.

—¿Por qué estás aquí? —Digo con curiosidad.

—La verdadera pregunta es, ¿qué haces tú en mi prisión? —Pregunta cruzándose de brazos con una sonrisa.

—¿Tu prisión? —Repito levantando una ceja, sin creerme lo que dice.

—¿Qué eres? —Dice Kai. — Humana, bruja, vampiro...

—Adivina. —Contesto con una sonrisa desafiante.

Kai pone los ojos en blanco para después mirarme con una sonrisa.

...

—Te apuesto tres latas de cerveza a que no consigues lanzarte sobre esa estantería sin tirarla. —Le reto.

No sabría decir cuánto tiempo ha pasado. Un mes, un año... Contar aquí el tiempo es absurdo. 

—Mira y aprende. —Me contesta.

Antes de que dé el salto, oímos voces. Miro a Kai y hago un gesto para que no haga ningún ruido.

Esas dos voces son más que conocidas para mi. Siento como la furia recorre mis venas.

Damon está aquí y no viene solo, Bonnie está con él.

—Quédate aquí y habla con ellos, ¿vale? —Susurro escondiéndome. 

Kai no mira hacia donde me he ido, sino que mira al frente. 

Los tres mantienen una conversación, y cuando Kai les saca información suficiente, salgo de mi escondite. Damon y Bonnie me miran sorprendidos. 

—¿Cómo es posible? —Pregunta Bonnie.

—Se ve que algo no te salió bien. —Contesto cruzándome de brazos. — Y al parecer ahora estáis aquí atrapados, conmigo.

—Y conmigo. —Añade Kai.

Sonrío pensando en lo que me dijo Kai. Hay una forma de salir de aquí, solo necesitábamos a una bruja y aquí la tenemos.