The Vampire Diaries Imagina. (Damon) #3

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4. Te lo dije, estoy maldita. 


Mentiría si dijese que nunca me había imaginado este final, aunque jamás pensé que moriría salvándole a él. 

Damon Salvatore. 

Un chico interesante de ojos azules y pelo oscuro. Si me hubieran dicho que daría mi vida por el chico arrogante que me atropelló, me hubiera reído en su cara. 

'Absurdo, simplemente absurdo. Murmuro. 

Me llevo las manos al pelo, irritada. ¿Quién son los Salvatore y por qué están aquí?  

Doy una patada a la papelera que tengo a mi derecha. Veo como sale volando y choca contra un árbol. La basura cae a la acera y maldigo por lo bajo. 

Con rapidez recojo todo y vuelvo a colocar la basura en su sitio, aunque algo en la carretera me llama la atención. Camino hacia el objeto y me agacho para cogerlo. 

Es un colgante. 

Estoy tan concentrada observándolo que no oigo el coche que se acerca hasta que me golpea. Salgo disparada hacia delante, soltando el colgante en el proceso. Choco contra el asfalto con fuerza. 

Enfadada, me levanto. 

Un chico alto sale del coche, se coloca la chaqueta y camina hacia el colgante. 

Antes de que pueda agacharse a cogerlo, estoy a su lado. Veo como el chico sale volando hacia atrás, igual que hizo la papelera instantes atrás. 

Me río ante mi comparación y me agacho para coger el colgante.'

—No cierres los ojos, sigue conmigo. —Susurra Damon. 

Le miro e intento dedicarle una sonrisa, pero toso, haciendo que Damon frunza el ceño. 

—Te lo dije. —Intento decir sin atragantarme con la sangre que tengo en la boca. — Estoy maldita. 

Damon niega con la cabeza, triste. 

'El chico se levanta del suelo igual de furioso que yo. Se acerca a mí, pero le hago un gesto para que pare. 

—Ni se te ocurra. —Amenaza. 

Sujeto el colgante dentro de la alcantarilla. 

Este colgante debe de ser muy importante para ti. Digo mirándole. Tienes muy malos modales. 

Dame el colgante si no quieres que te arranque al cabeza. 

¿Perdón? —Pregunto fingiendo que se me resbala un poco la cadena. 

El colgante cuelga un poco más cerca de la oscuridad.'

Con la poca fuerza que me queda, levanto mi mano izquierda hacia la mejilla de Damon. Apoyo mi mano y hago que me mire. 

—Tienes que irte. —Susurro. — Yo ya estoy muerta. 

—No, no lo estás. —Contesta. — Bonnie no tardará en llegar, ella sabrá como parar este hechizo. 

Niego con la cabeza, Bonnie no va a llegar a tiempo. Este es mi final, y por mucho que Damon no lo quiera, tengo que despedirme. 

—Damon. —Le llamo. 

Veo como vuelve a centrarse en mi, dejando de mirar a su alrededor para ver si llegan en nuestra ayuda. 

—Ha sido un placer ser tu amiga. —Admito. — A pesar de que intentases matarme. —Digo sonriendo. — Dos veces.

Damon sonríe un poco, pero el miedo no desaparece de sus ojos. 

—Es un hechizo de nada. —Murmura. — Bonnie lo parará. 

Empiezo a toser. Siento que me falta el aire. Intento respirar con tranquilidad, pero me atraganto con mi propia sangre. 

—Por favor, (A/N), aguanta. —Dice agarrándome con fuerza. 

Me río, aunque me duele al hacerlo. 

Pensé que viviría para siempre, contaba con mi torpeza, pero desde que desperté de nuevo tras mi muerte humana sabía que aunque me cayese por las escaleras estaría bien. Pensé que nada podría pararme. 

Qué ilusa. 

El dolor se hace insoportable hasta que dejo de notarlo. Mi brazo cae, dejando de tocar la mejilla de Damon y choca contra el suelo. 

Las últimas palabras que escucho vienen de  mi amigo. 

—Mataré a la bruja que te ha hecho esto, no descansaré hasta verla arder. 

I M A G I N A S. #2 [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora