La vida de Yuuri Katsuki ha sido muy buena, solo que había un detalle, le faltaba una pareja, estaba cansado de estar solo, pero lo que nunca pensó fue que... en una noche al desear a su pareja ideal, los Dioses Ágape y Eros lo escucharon, ellos so...
Hoy era día sin entrenamiento y el día había amanecido levemente nublado, se paró de la cama tratando de no despertar a Víctor en lo que iba a asearse.
Al salir del baño se quedó observando al joven adulto que descansaba en su cama, lo imaginó sin ropa, con el cabello revuelto y este diciéndole — Yuuri, hagámoslo — Que fantasía tan caliente, se pegó las mejillas para sacar esos pensamientos indecentes y fue a la cocina, se sirvió cereal.
Víctor apareció por la puerta con un pantalón de tela cómodo, un suéter y con su largo cabello atado en una coleta de caballo. Tenía una apariencia joven pero a la vez adulta que aparentaba tener 20 años, y Yuuri no se quedaba atrás, sus genes japoneses lo hacían ver cómo un adolescente.
— Buenos días, amor.
Yuuri se sonrojó al tal apodo, más cuando Víctor se le acercó para depositar un beso en su mejilla izquierda, de verdad que era un cariñoso y eso le gustaba de una pareja.
— Buenos días...
— ¿Cómo amaneciste? — Victor tomando asiento junto a Yuuri y apoyando su rostro en su mano se le quedó viendo, para él era el ser más hermoso de todos.
— Bien, Victor... ¿Y tú?
Para Yuuri tener a Víctor, una persona que acababa de conocer el día anterior y que invadía su privacidad lo ponía ansioso, nervioso, y un poco incómodo. No importaba si era su pareja soñada o tener todo el derecho de amarlo y tomar su cuerpo, para él era una persona que acababa de conocer por ende no debía tomarse las cosas con rapidez, les prometió a los Dioses Ágape y Eros que aceptaría intentar enamorarse de Víctor por eso no intentaría por el momento actuar como si fuesen novios y trataría de igual manera tener contacto físico — Sexual — con Víctor.
— De maravilla, Yuuri. Mi primera vez durmiendo fue estupendo.
Yuuri arqueo una de sus cejas.
— ¿Quieres comer? Te serviré un plato — Yuuri se levantó pero una mano le impidió que se levantase.
— Prefiero comer del propio plato que Yuuri.
— ¿¡Huh?!
Víctor señaló su boca mientras la abría, y luego señaló la mano de Yuuri quien sostenía la cuchara con cereal.
Yuuri como si automáticamente lo obedeciera llevó la cuchara en la boca del mayor. Víctor masticó encantado de que Yuuri lo alimentara y Yuuri lo miró curioso.
«Qué infantil» pensó.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lo más sagrado del Olimpo es un lugar llamado Sala del Equilibrio Divino ahí es donde los Dioses tienen su fuente de poder, gemas preciosas y únicas tienen el poder de mantener con vida a su Dios, protegidas por ángeles guardianes de los cielos mantienen con seguridad estás gemas adentro de cada pedestal de su correspondiente Dios.
