Capítulo 6: Un nuevo sentimiento

3.7K 288 61
                                    

Katniss

— ¿Qué crees que están diciendo? — le pregunto a Peeta mientras pincho su brazo con mi dedo índice, obteniendo su atención.

Rye va en su regazo y Willow de mi mano mientras caminamos lentamente, concentrados en admirar la evolución de nuestro distrito.

— ¿Ustedes pelearon? —cuestiona Willow de repente, para detenerse en frente nuestro con el ceño fruncido, aún con su pequeña manito en la mía.

— No, hija ¿por qué? —le pregunta Peeta.

— Los dos se dan las manos cuando salimos a caminar —argumenta aún con las cejas fruncidas.

Ambos apretamos los labios, sabiendo lo que viene a continuación; no pasan ni dos segundos cuando una de las manos de Peeta se une con la mía, dándole libertad para que nuestros dedos se entrelacen.

Willow sonríe satisfecha, volviendo a caminar al lado mío, seguimos cruzando la plaza hasta llegar a la panadería.

— Oh... —Peeta no puede evitar sentirse sorprendido, todo luce muy diferente ahora.

Ya no existe aquel aspecto de descuido que antes caracterizaba al local, al igual que todo el distrito que se ve nuevo y lleno de vida.

Entramos oyendo la campanilla de la puerta, un segundo después aparece Delly detrás del mostrador donde se supone que se atiende a los clientes.

Hasta que se deja ver, aquí.

— ¿Delly?

— Buen día, Peeta. Creí que no vendrías hoy —lo saluda la rubia.

Él se concentra en mirar a su alrededor con una expresión un tanto... boba. Las paredes están pintadas en tonos pasteles con detalles en color naranja, las mesas cubiertas con manteles coloridos y con grandes ventanales que dan una perfecta visión de la plaza en el exterior, la vitrina donde se muestran los dulces es de vidrio, también están las cestas repletas de panes de todo tipo; y el olor, es el mismo que hace tantos años me hacía desear probar una hogaza de ella.

— Me atrasé un poco —responde Peeta.

— Lo notamos —ella suelta una risita mientras se recoge el cabello rubio en una coleta —, Bob está a cargo de los dulces, los panes ya salieron pero no como los tuyos.

Las mejillas de Peeta se colorean, dejándome ver, claramente, el gesto que un niño en el cuerpo de un hombre.

— Voy a trabajar en una buena masa —murmura.

Ella nos sonríe a ambos antes de pasar un paño húmedo sobre las mesas para limpiarlas, luego se encarga de poner en orden las bolsas de papel para cargar los productos.

— Vengan —dice Peeta y abre la pequeña puerta para que entremos por detrás del balcón, su gentileza me sorprende a la vez que me fascina.

La parte trasera de la producción es nueva para mi, nunca había visto los hornos, las máquinas y la preparación. Adentro se siente un calor distinto, por lo que nos vemos obligados a sacarnos los abrigos.

— Buen día, jefe —un hombre de mediana edad saluda a Peeta con una sonrisa al salir de atrás de uno de los hornos.

— Buen día, Bob.

— Trajiste a tu familia, es un placer verlos.

Willow y Rye corren hasta abrazar las piernas del hombre, miro a Peeta y él parece igual de sorprendido que yo.

— ¡Quedemos galletas! —Rye vuelve y se pone en puntillas delante de Peeta, él lo toma en brazos y lo lanza en el aire para cogerlo nuevamente, provocando que el pequeño ría a carcajadas.

Tiempo » [Katniss & Peeta]Where stories live. Discover now