A Bad Girl

Capitulo 37

Dominic y yo hemos llegado al apartamento hace aproximadamente una hora. Hoy es la cena de gala de William y yo me estoy preparando. Hana me consiguió un vestido largo escandaloso pero bastante atractivo.

—El ambiente esta tenso —dice mientras cepilla mi cabello y hace mi peinado.

—Sí, ninguno quiere fallar, eso arruinaría todo.

—Además no quisiera ver a Dominic molesto.

—Molesto no, furioso.

—Sí...

Al finalizar, me veo en el espejo y descubro una nueva Kate.

—Eres demasiado bonita.

—Claro que no —giro un poco para el ver el escote de la espalda.

—No mientas.

—Ahora, a matar.

Camino hacia la cama y tomo dos cuchillos, los cuales guardo en una delgada funda en mi muslo, debajo del vestido. Tocan la puerta y al abrirla veo a un muy elegante y guapo Dominic.

—Ustedes dos, están encantadores.

—Gracias Hana.

—Más les vales que hagan lo necesario.

—No lo dudes ¿nena? —me ofrece su brazo.

—Vámonos.

Salimos del edificio y en el auto, de camino al edificio de William, vamos en silencio, más tensos que nunca, supongo que Dominic está nervioso o molesto.

— ¿Cuál es el plan? —poso la mano en su muslo.

—Cenaremos, hablaremos, bailaremos y luego finalizando todo, te llevaras a William a una de las oficinas y lo "seducirás".

— ¿En serio?

—Sí, solo necesito que estén a solas para matarlo.

—Está bien.

—No tienes que dejarte hacer nada por él —toma mi mano.

—No lo haré.

—Hoy será una gran noche, nena. Una gran noche.

— ¿Qué haremos luego?

—Sam y Harry nos estarán esperando detrás del edificio.

— ¿Y qué pasará con los demás?

—Ya se están yendo, Harvey se está encargando de nuestras cosas, iremos a la costa.

—De acuerdo —miro a través de la ventana.

—Te ves hermosa hoy.

—Gracias.

Veinte minutos más tarde, los dos bajamos del auto con aire imponente, inevitablemente todos en la entrada voltean a vernos—. Genial, tenemos su atención —miro mal a Dominic.

—Solo ignóralos.

Subimos al piso acordado tomados de la mano.

— ¡DOMINIC! —dice William alegre a verlo—. Y Kate, pensé que era tu asistente —ya quiero apuñalarlo.

—Sí, las cosas cambiaron un poco.

—Qué maravilla.

— ¿Qué tienes preparado para esta encantadora noche?

—Ahorita es la recepción, tomen algo, prueben los bocadillos, luego en la cena, después una pequeña reunión para conocernos, un pequeño baile y por ultimo un salón libre.