Porque te quiero [Stiles Stilinski]

CAPITULO 10.

—Estas haciendo esto porque mientras intentamos no morir tenemos que seguir viviendo—dijo Scott—. Lo que quiero decir es que después del instituto quiero ir a la universidad, una buena.

—Solo dura tres horas—comentó Kira captando la atención de sus amigos—. Podremos sobrevivir tres horas.

Se miraron entre si, incrédulos por el reciente comentario.

Entraron a clase tras hacer la fila y uno por uno fue dejando sus huellas tactilares sobre una hoja. Tras limpiarse el dedo pulgar debían dejar sus móviles en unos sobres amarillos. Por lo cual copiar en ese examen estaría complicado.

—Por favor, no abráis el folleto del examen hasta que os lo indique—dijo el señor que llevaría a cargo la clase durante las tres próximas horas.

Al decir eso Stiles cerró rápidamente las hojas puesto que ya lo estaba viendo.

Emily se sentó detrás de Stiles y observo su cuello por varios segundos. Se le hacía apetecible.

«Controla tus hormonas» se regañó ella misma.

—Debería haber dos profesores vigilando en este examen—le dijo el señor a la madre de Lydia.

—Lo sé. Es el entrenador. No es demasiado puntual. Deja que intente localizarlo.

Dicho esto salió de clase.

—No puedo encontrarlo—mintió ella al entrar de nuevo. Había visto al entrenador en su despacho totalmente borracho—pero el señor Yukimura está arriba corrigiendo exámenes, ¿quiere que lo llame?

—Tenemos que empezar. Le pediremos que venga en el primer descanso. Ahora podéis abría los cuadernos y empezar.

Emily sintió como su corazón bombeaba con fuerza. Estaba muerta de los nervios, suspiró y comenzó a leer.

No habían pasado ni cinco minutos cuando la chica que estaba a su lado cayó al suelo.

—¡Sydney!—la llamó la profesora y trotó hacia ella.

La ayudó a pararse del suelo y volver a su sitio.

—Estoy bien—repitió la chica ante la atenta mirada de todos—me ha dado un pequeño mareo.

—Sydney, ¿cuánto hace que tienes esto?

Le miró la muñeca donde tenia una extraña marca sobre sus venas.

—No lo sé—contestó.

—Señora Martín, ¿tengo que detener el examen?

—Eh... No. Está bien. Quedaos todos en vuestro sitio volveré enseguida. Que nadie salga del aula—le dijo al señor, preocupada.

Cogió su movil y volvió a salir de allí. Emily se miró las uñas como si fuera lo mas entretenido del mundo. Stiles se giró para entablar una conversación con ella. Esta le sonrió. Y antes de que pudieran hablar escucharon gritar a la madre de Lydia. Para curiosidad de todos menos la de Emily salieron corriendo de la clase. Ella prefirió seguir viendo sus uñas en cuanto Stiles se fue.

Scott escuchó como la señora Martín llamaba al centro de control de enfermedades.

No se supo cuanto tiempo pasó hasta que toda esa gente cubierta por extrañas capas amarillas comenzó a desfilar por el pasillo. Parecía sacada de la película de E.T. Llevaban muchos maletines y cubrían una sala para los enfermos.

—Seguro que piensan que es viruela—les dijo Stiles a las chicas.

—No es probable—soltó el profesor—la viruela se erradicó en 1979 en todo el mundo. Solo se han erradicado dos virus a los largo de la historia. La otra fue la peste bovina, mataba a las vacas.