Take You Home (SuperCorp)

Capítulo 13

Sus manos no dejaban de temblar y cuando sintió los dedos de Jess masajear sus hombros suspiró agotada. Estaba en frente del espejo de su habitación, un vestido rojo de palabra de honor de ceñía a su torso y caía hasta sus rodillas mientras su amiga seguía colocando horquillas en el recogido de su pelo, dejando varios mechones sueltos.

-Llevas todo el rato callada y no es propio de ti -habló Jess con varias horquillas entre los labios.

-Voy a estar tan cerca de ella y no voy a poder verla...

-Kara escúchame -colocó las manos en sus hombros y se asomó para conectar sus ojos a través del espejo- sé que quieres verla pero hoy no es el momento, estará lleno de gente, no puedes arriesgarte a volver a esa celda, si te descubren posiblemente acabes en una igual.

La rubia abrió la boca para replicar pero se limitó a suspirar, asintiendo ligeramente.

-Pensaremos un plan para que puedas verla, te lo prometo, hablaremos con Mon-el o con quien sea.

Kara volvió a asentir y le sonrió ligeramente cuando acabó el peinado. Se puso los tacones negros y se plantó frente a su amiga, abrazándola.

-Y ten cuidado -murmuró la castaña dando ligeros golpecitos en su espalda.

-Lo tendré... ¿Estarás despierta cuando vuelva?

-Caeré rendida ante mi cama pero siempre eres bienvenida a venir a despertarme y contarme tu noche, aunque te arriesgas a que te tire la almohada a la cara -dijo haciendo reír ligeramente a su amiga.

-De acuerdo -sonrió.

La voz de Alura sonó al otro lado del pasillo y ambas chicas salieron de la habitación en silencio.

-Nos vemos luego -murmuró Jess despidiéndose de ambas.

-Estás preciosa Kara -habló su madre mientras acariciaba su mejilla.

-Gracias... ¿Seguro que estás en condiciones de ir?

-Cariño me dieron el alta porque estoy bien, no te preocupes.

Kara asintió ligeramente y la siguió por los pasillos que hacían resonar el sonido de sus tacones hasta la puerta, donde su padre las esperaba.

Cuando aterrizaron en Daxam se quedó inmóvil en su asiento, mirando por la ventana cómo los invitados entraban en el palacio. Una cena de gala, con los mayores empresarios y adineradas familias de ambos planetas, una forma de reforzar lazos, de hacer ver a los ciudadanos que seguían unidos, que la alianza era más fuerte que nunca. Todos vestían sus mejores trajes y sonrisas.

Su padre abrió su puerta y le tendió la mano para ayudarla a bajar, con una sonrisa cogida de su brazo y con su madre al otro lado, los tres subieron las escaleras hasta la gran puerta, donde Rhea y Lar Grand saludaban a todos los invitados.

-Bienvenidos familia Zor-El, un placer teneros aquí -habló primero el rey mientras Kara evitaba la mirada de Rhea.

-Gracias por invitarnos -contestó su madre, estrechando su mano.

-Disfrutad de la música, de los aperitivos, las bebidas... en unos minutos dará comienzo la cena en el comedor principal.

Dentro la gente hablaba entre ellos, riendo y comiendo mientras de fondo una pequeña banda de música clásica tocaba por debajo del tono de las voces. Sus padres empezaron a saludar a los allí presentes y Kara se perdió caminando entre la gente en busca de las bebidas cuando sintió una mano cogerla del brazo.