Capítulo 32

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Veinticuatro semanas.

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Es un domingo algo caluroso y la familia Styles-Tomlinson se encuentra en una reunión familiar en el jardín de los muy prontos padres primerizos.

Mark y el abuelo se encargan de preparar unas hamburguesas al estilo Tomlinson, mientras Anne y Jay no han parado de perseguir a Louis a cada lugar que va. Las gemelas se encuentran muy concentradas trenzando el cabello de Lottie y Fizzy.

Todo está casi listo para la comida pero solo hay un inconveniente Harry Edward Styles Cox no aparece por ningún lugar y tampoco atiende el teléfono y podríamos decir que Louis estaba nervioso y muy en su interior furioso.

Cuando está apunto de enloquecer y llamar a la policía. Escucha la puerta principal abrirse corre dentro de la casa con todos siguiéndole.

Harry cierra la puerta y cuelga su abrigo sigilosamente, levanta su mirada y se encuentra con todos viéndole con asombro. Y el solo les sonríe mostrando los dientes.

― ¡Oh por Dios! Que le has hecho a tu cabello.―grita Louis.

― Ah lo notaste...―interrumpe acercándose a él.

― ¡Harry todo mundo aquí lo noto!―vuelve a gritar cerca de su rostro.

Cierra los ojos y retrocede― solo lo he cortado no les gusta― los mira arqueando su ceja.

―A mí me gusta t-te vez muy... bien―Fizzy traga saliva, ruborizada.

―gracias cuñada.― y ella asiente notablemente decepcionada.

Louis observa detenidamente a su hermana, y niega repetidas veces en sus adentros solo esta alucinando no podía ser más que su loca cabeza y sus hormonas. Le resta importancia cuando ve a las gemelas tocando los cabellos del rizado.

―ya no tendremos a quien trenzar.

―oigan estamos aquí―dicen Lottie y Fizzy ofendidas.

―como decíamos no será lo mismos sin ti Harry―sonríen

―tranquilas pronto crecerá de nuevo ―les ánima. Ellas asienten emocionadas y salen de nuevo al jardín.

― ¿qué tal me veo? ― pregunta a los demás. Mark y el abuelo alzan sus pulgares y se van

― me gustaba más antes―dice al mismo tiempo Lottie, Jay y Anne.

―!mamá!―ella se encoge en hombros, suelta una carcajada y sale de nuevo al jardín de tras de los demás.

Cuando todos se van Harry toma por las caderas al castaño. ― Lou tu no me dirás como me veo- dice cerca de su oído y la piel del castaño se eriza.

―no estoy para esas cosas ahora.

― ¿estás enojado?

―si- dice sin rodeos

―esa no me la esperaba.

―por qué no atendías el teléfono idiota.- golpea su pecho con "furia".

―es que quería sorprenderte, lo siento- atrapa su labio inferior entre sus dientes.

―te odio tanto, no hagas esa cara te vez ardiente tanto que amaría que me follaras en este instante pero uno esta panza no me deja y dos tenemos visitas.

―eso yo puedo arreglarlo, puedo despedirlos a casa ahora mismo- acaba con el abrazo, intenta salir pero Louis lo detiene.

―que estás loco animal- (inserta voz de Federica peluche) lo agarra de la oreja.

―auch espera Louis duele- lo suelta de repente y sus ojos se abre por la sorpresa.

―H-harry el bebé, él....

―que pasa el bebé que... habla por dios.

― ¡el bebé se está moviendo!- grita emocionado. De un momento a otro todos entran corriendo a la casa.

―el bebé se ha movido- preguntan emocionadas las chicas, Louis asiente todos corren y tratan de tocar su panza, pero antes de siquiera poder llegar a él Harry se coloca delante de Louis.

―una a una salvajes, y como yo soy el padre voy primero- Louis sonríe.

Lleva sus manos hasta la panza de Louis, sus ojos se llenan de lágrimas al sentir como su bebé se mueve. Besa repetidas veces la pancita del castaño, para luego recuperar la postura y besarlo.

(...)

Todos se han ido a casa y ahora solo están ellos dos el día fue hermoso, su hija no pudo elegir mejor momento para patear por primera vez. Ahora harry se encuentra en la cama leyendo algo y Louis está terminando de colocarse el pijama. Cuando por fin termina Louis lo llama.

―harry.

Este aparta su vista del libro y mira a Lou―sí.

―podrías hacerme un favor.

―depende.

―bien necesito que mañana saliendo de la oficina vayas a buscar unas cosas que hacen falta en la casa.

―puedo llegar más temprano y pasar por ti e ir juntos. –Louis niega.

―no quiero que dejes de hacer tu trabajo mi querido ex guardespalducho, aparte mañana iré donde mi madre, así que cuando termines tu trabajo vas por las cosas y pasas por mí. De acuerdo.

El castaño se mete a la cama, Harry deja el libro de lado y lo abraza―bien amor yo pasaré por ti.

Genial su plan saldría perfecto.











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