Our Damn Mistake || Joerick ||Terminada

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-Contesta, Jo-dijo Erick al ver que Joel no tenía ganas de contestarle.

-No respetaste mi privacidad, ¿te parece poco? -decidió contestar.

-Solo leí tu diario, no quería...

-Erick, es mi diario sagrado, ahí guardo todo lo que siento. Ni mi mejor amigo sabe lo que escribo ahí -Erick bajó su mirada.

- ¿Tu mejor amigo? ¿Quién? -preguntó con la voz delicada, aquella confesión lo había lastimado.

-Pues Yoandri, ¿quién más?

-Oh, perdón, no sabía.

-Todos lo saben, Erick, no creo que tú seas el único.

-La verdad no sabía, no se todo sobre ti. Es solo que siempre creí que yo era tu mejor amigo.

-No lo eres, no desde que leíste mi diario sin mi permiso.

-Lo sé, pero mi intención jamás fue lastimarte, créeme.

-Lo hiciste, ahora déjame en paz, no quiero hablar contigo -contestó decisivo.

-No puedes quedarte molesto conmigo.

-Ya lo estoy haciendo.

-Joel, yo...

- ¡Basta! -gritó fuertemente-, no quiero hablar más -se levantó del puesto, agradeciendo en la mente que todavía no había despegado el avión-. ¿Puedo irme de acá? No quiero estar con el -se dirigió a Renato.

-Okay, entonces descambia con Chris -asintió y fue al puesto donde antes estaba el de flequillo.

- ¿Que sucedió? Oí su grito, debe ser algo importante -pregunta Christopher tomando asiento al lado de Erick.

-Lo es, por lo menos para el- contesta el otro sin ánimos de formular alguna palabra

- ¿Que leíste en su diario?

-No te importa.

-Solo quiero saber.

- ¿Cuándo dejaras de meterte en las cosas de los demás? -balbuceó fastidiado, ya era costumbre hacerlo

- ¿Disculpa? Eres la persona menos indicada para hablar de "meterse en las cosas privadas de los demás". Lo que yo tengo entendido es que TU te metiste en las cosas de Joel.

-Eso es problema mío y de él, no tiene que ver contigo.

El menor se colocó sus audífonos para no tener que oír ninguna palabra que saliera de la boca de Christopher. Siempre que viajaba debía tomarle fotos al paisaje, pero no esta vez, no le apetecía. Intento dormir, pero fue inútil, jamás había dormido en un avión.

8 horas después llegaron a Buenos Aires, Argentina. Estaban en el hotel.

-Chicos, en una hora iremos a una entrevista -informó Renato-, así que los quiero listos a las tres.

-Bien, iré a dormir un rato porque estoy cansado- contesta Zabdiel bostezando.

-Dormiste en todo el viaje, ¿cómo vas a estar cansado? -río Joel, dirigiéndose a Zabdiel.

-No lo sé, es un don supongo -contestó y fue a dormir, Joel repitió su acto.

-Creo que me iré también -dijo el ojiverde sin ánimos, dirigiéndose a su respectiva habitación.

Erick encendió el celular y vio las historias de Instagram: Chris no subió nada, Zabdiel tampoco, Richard le tomo foto al paisaje y Joel subió millones de vídeos con Zabdiel a pesar de que no quería hablar con nadie. No pudo evitar ponerse celoso, arrojó el celular a su cama y fue a la habitación de Christopher.

En ella se encontraba Zabdiel, sentado en el sofá y Chris y Richard sentados en el piso. No estaba Joel.

-Pensé que estabas cansado -el menor se dirigió a Zabdiel, quien estaba jugando con su teléfono.

-Lo estaba, pero empezaron a molestarme -dijo golpeando ambas cabezas, Erick río.

- ¿Quieres jugar? - pregunta Richard curioso.

- ¿A que juegan?

-A "¿Que probabilidad hay?"

-Está bien, pero por favor retos extremos no.

-Tranquilo.

Algo le decía a Erick que no iba a suceder lo que juraron no hacer los otros dos chicos, pero no sabía porque su mente pensaba eso.