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Febrero 28 - 1:00 a.m

Joel ya había sido felicitado por todos los chicos de la banda, excepto Erick y se preguntaba dónde podría estar. Esperaba ansioso en su habitación alguna señal de vida del menor, pero no había ni una.

Espero diez minutos y volvió a mirar su celular: había un mensaje y no lo había visto.

Erickin <3: Jo, vístete, estoy abajo en la recepción. Te espero aquí.

Joel salió rápidamente de su habitación, sin siquiera apagar la luz de esta. Ya estaba vestido, sabía que su novio lo llevaría a algún lugar. Apenas bajo a la recepción, Erick lo estaba esperando con una sonrisa. Le deseo un feliz cumpleaños, acompañado con un beso y lo llevo a un lugar que desconocía en un carro desconocido.

-Se lo ha robado -pensó con una sonrisa mirándolo fijamente.

Llegaron al preciado lugar; era un hotel. Por la cabeza de Joel pasaban miles de preguntas que no podía responder. Pidió las llaves de su habitación, al parecer, Erick ya había estado aquí antes. Se dirigieron a su correspondiente cuarto y antes de entrar, el menor tapó los ojos de Joel con un pañuelo.

- ¿Qué haces? -pregunta sin poder ver.

-Sólo cállate y camina-habla en un susurro sin perder el contacto de Joel.

Sintió un leve golpe y un quejido del ojimiel, no pudo evitar romper a reír; Joel se había golpeado con el marco de la puerta.

-¡Maldita puerta! -chilló, Erick seguía riendo.

-Sh -posicionó el dedo índice en su boca para callarlo.

Desató el nudo del pañuelo y les dio permiso a los ojos de Joel para poder ver la sorpresa; en las paredes de aquel lugar había corazones rojos, a un lado de la cama había un letrero que decía: "Joel, te amo" pintado con un color rojo y blanco. Y encima de la cama, había trozos de papel rojo formando un corazón.

El mayor no pudo evitar reír.

- ¿De qué te ríes? -pregunta Erick con el ceño fruncido.

- ¿Hiciste esto por mí?

-No, por Alicia-bromeo en sarcasmo, Joel levanto una ceja-. Obvio que sí, imbécil.

-Gracias, mi amor -se lanzó contra él y le dio un beso, bastante lento, no habían apuros.

Joel fue intensificando aún más el beso y no iba a parar. Caminó, todavía en el beso, hasta llegar a la cama y sentar al ojiverde en esta.

-Esta vez, y las veces siguientes, seré yo quién lo haga -afirmó susurrando contra su boca de manera provocativa y Erick mordió sus labios aguantando un gemido.

Comenzó a darle chupetones en su cuello de manera desesperada. Le levantó la camisa y esparció besos por todo su pecho, acostándolo en la cama despacio. Erick podía sentir su miembro endurecerse cada vez más. Y con cada toque de parte del menor, se estremecía.

Joel empezó a desnudar a Erick, mientras que él tambien lo hacía con su ropa. Cuando ambos estaban completamente desnudos, Joel empujó a Erick hacia la cabecera de la cama mientras lo besaba otra vez. Iba mordiendo sus labios con deseo porque así era; realmente lo deseaba.

-Métela ya -pide Erick en un gemido.

-Eso haré -afirma succionando el cuello de Erick.

Preparó dos de sus dedos y los introdujo en la boca de Erick para lubricarlos. Empezó por meter solo un dedo en su entraba mientras hacia círculos en su interior, Erick gimió con fuerza. Preparó el siguiente dedo y lo metió con cuidado. Hizo movimientos circulares con sus dedos dentro de él, y cuando vio que Erick ya estaba listo, los sacó y metió su pene con fuerza llegando a su próstata con una sola embestida.

Erick gimió muy fuerte, y podía asegurar que todos los del hotel pudieron escuchar, pero no le importaba. Empezó a penetrarlo con más fuerza, mientras aumentaba sus embestidas hasta que la habitación empezó a sumergirse en gemidos desesperados.

-Te amo -susurró Joel y el ojiverde asintió.

Observó detalladamente su rostro mojado por el sudor, sus ojos dilatados, su cabeza inclinada hacia atrás, mientras lo hacía suyo, mientras masturbaba su miembro, mientras dejaba ir las ofensas que en algún momento le dijo.

-¿Te gusta? -habló Joel aumentando más las embestidas.

-S-sí -afirmó Erick y así era; se sentía maravilloso.

Amaba sentir el cuerpo de Joel moverse velozmente dentro de él como un vaivén. Amaba la sensación que habitaba en él cuando Joel se resbalaba en su interior. Amaba cuando Joel entraba profundo y tocaba sus partes delicadas haciéndolo gemir alto. Lo amaba a él y no había manera de decir lo contrario.

El cubano sintió un temblor en su cuerpo, y supo a qué se refería: iba a llegar y su temor era correrse encima de su cuerpo. Así lo hizo, se corrió manchando todo en el pecho del mayor y un poco en su pierna. Joel siguió con sus embestidas más rápido hasta que termino también dentro de Erick.

Sonrió satisfecho y se acostó en la cama, dándole paso a Erick para que se acostara encima de su pecho. Empezó a acariciarlo con sus dedos logrando que el menor arqueara su espalda, le gustaba esa sensación.

-Joel -habló entrecortadamente tratando de recuperar el aire.

- ¿Sí?

-También te amo -soltó, el mayor besó su frente-. Mañana me dolerá demasiado.

-Y tendrás que aguantarlo, porque ahora yo seré quien la meta.

-Me ha gustado demasiado.

-¿Entonces no hay problema?

-Ningún problema, aunque me dolerá, y demasiado -suelta Erick besando su mejilla.

-Te acostumbrarás, lo prometo.

-Te amo, en serio te amo -confesó cambiando la conversación drásticamente.

-Ya lo dijiste, Er.

-No importa, lo diré todas las veces y no me cansaré de repetirlo, ¡te amo, Joel Pimentel!

-Yo te amo mucho más que eso.

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Es el ultimo smut de la historia so no hare más. No soy buena escribiendo este tipo de cosas, no me juzguen. Apenas voy aprendiendo.

Las amo

Se despide, Mary. 

Our Damn Mistake || Joerick ||TerminadaWhere stories live. Discover now