Trillizos Park. - bts.

024

Wattpad está fallando y a mucha gente no le salía el capítulo visible, así que lo resubo para ver si funciona ahora. Espero que lo disfruten :)

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  —No entiendo por qué el queso huele a pies, con lo bueno que está. 

  —Lleva caducado desde el año pasado.

  —¡Pero está bueno!

  —Pues cuando te cagues cada cinco segundos no vengas a quejarte.

SeokJin rodó los ojos y se llevó el último trozo de queso a la boca, recostándose sobre la cama de mi habitación con toda la libertad del mundo, descarado.

Eran las diez de la noche y yo me dedicaba a estudiar para los próximos exámenes como era de costumbre, hasta que mi hermano irrumpió escandalosamente en mi habitación gritando que me extrañaba y que aquella noche me haría compañía puesto que Hoseok, su compañero de habitación, iba a estar ausente. Fuera como fuese su rostro estaba bañado en preocupación desde el primer segundo en que lo vi, pero no quiso hablarme del tema. Tan sólo se dedicó a arrasar con toda mi comida y hablarme de la fiesta de la noche anterior. 

  —Sigues siendo mi hermana favorita.

  —Es lo que tiene ser tu única hermana, imbécil. 

Una risita traviesa salió de sus labios mientras tomaba el mando de la televisión y la encendía. Fue una sonrisa malvada, de esas que aparecen antes de cometer un error intencionado o placentero. Su error, tal y como predije, consistía en una pregunta:

  —¿Qué tal con Liz? —su repentina pregunta me tomó por sorpresa. Dejé el bolígrafo y giré sobre la silla, fijando la mirada confundida en él—. Pensaba que ibas enserio con ella.

  —Oh, eso... —me encogí de hombros—. Simplemente es una buena amiga. Apenas he hablado con ella. 

  —Pero tuvisteis sexo.  

Aquí venía otra vez. Dejé salir un bufido y volteé de nuevo hasta el escritorio, dándole la espalda con una notable molestia. No entendía porqué estaba tan jodidamente pesado con el tema, pero comenzaba a cansarme. Cada vez que encontraba el momento terminaba interrogándome sobre la relación inexistente entre Elizabeth y yo, tal como un padre protector. 

 —¿Y qué? Tú y tus amigos folláis con quién os da la gana, ¿porqué no puedo hacer lo mismo? 

  —¡Es que no estoy acostumbrado!

 —¡Pues cuando me pillaste con Taehyung aquella vez y pensaste que íbamos a tener sexo, no te importó tanto!

  —¡Pero es que era Taehyung! Además, hacéis buena pareja. 

Me llevé las manos al rostro, soltando un gruñido plúmbeo al ver a dónde se dirigía la conversación. Negué con la cabeza y decidí no contestar a su protesta, poniéndome en pie y dirigiéndome hasta mi pequeño armario en una esquina del dormitorio. Saqué mi pijama de él y me deshice de mi ropa, colocándome la camiseta larga en su lugar; a Jin le lancé el mismo pijama que utilizó Dooly días atrás.

  —Da igual, SeokJin. Lo que quiero decir es que no tengo nada con Elizabeth, así que puedes estar tranquilo.

  —¿No te interesa ya? —tomó el pijama en el aire para proseguir quitándose la camiseta, mientras dibujaba una pequeña mueca en sus labios—. Es por decírselo, porque la idiota no deja de preguntarme por ti. 

Elizabeth era un gran interrogante en mi mente en aquellos momentos. Lo cierto era que no la conocía ni tenía la mínima confianza con ella, ni siquiera habíamos mantenido una buena conversación. En cambio, la había deseado desde el primer momento puesto que su figura era deslumbrante, sus facciones y su sonrisa. Pero todo eso se pasó aquella noche en concreto cuando participamos en la habitación de los gemelos y la velada terminó en su cama, compartiendo nuestras intimidades y placeres. 
Ahí supe que Liz solamente era eso: un cuerpo precioso y elegante, pero nada más. Elizabeth dejó de interesarme en un abrir y cerrar de ojos.