12. Nuestra historia

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Pov Carlos

Terminamos de 'conversar', bueno sí digo terminamos me refiero a Dorian, el cual salió decidido afuera, Cheiz se desapareció hace rato y yo me quedé siendo el mejor de los primos.

— Solo estamos siendo jóvenes, tío, tía, tienen la capacidad de hacerlo, no es como si se acabara el mundo —les abracé como último paso de mi actuación adorable.

— Lo pensaremos —habló la tía por el tío.

— Thank u —digo dándole besitos en la frente.

Se me antojó algo de la nevera y ya que todos se habían desaparecido de mi campo de visión era mejor actuar.

Habían uvas, había un pastel, había sandía pero lo que me llamó la atención fue un pudín que tenía una nota.

« Pudín de Dorian, solo de Dorian, no comerlo si no eres Dorian. Si eres Carlos, ni lo pienses idiota »

Oh, veo que es de alguien, pero acabo de ver mi nombre así que prácticamente si lleva mi nombre, es mío. Gracias Dios, por mi capacidad de razonar.

Pero no mames, "no comerlo si no eres Dorian", ni que fuera Cheiz el que está en la nevera.

En menos de dos minutos ese pudín era historia, busqué una pequeña bolsa negra de basura, dejé el empaque, la amarré y ahora sí boté está en la bolsa de basura de la casa.
Más vale prevenir que curar, Dorian me partirá el trasero si se entera, aunque la verdadera pregunta es cómo se lo parte a Cheiz.

Cubro mi boca para callar mi risa. Volviendo a la realidad.

¿Y la gente?

¿Dónde está mi gente?

¿No es así como inician las películas de terror?

Oh mi Dios, me van a violar. Me van a atacar y van a usar mi miembro para su placer, por qué obviamente yo nunca estaré abajo. ;)

Ay soy pendejo, por eso me amo.

Me estiré un poco y cuando me disponía a ir afuera la puerta se estrelló con mi rostro, creo que Cheiz entró muy rápido. VIDA TRISTE, ESTE ES EL KARMA POR COMERME EL PUDÍN DE DORIAN.

Me dispuse a seguirlo para cobrarle como nuevo mi rostro pero vi como su olor cambió, además del aura que emana, por un momento me pregunté si ir con él o con Dorian. Agh, soy débil.

Seguí a Cheiz, se metió en un cajón, quise sacudir este para asustarlo pero si leo el ambiente, no estamos para bromas.

Inicié la conversación, se escuchaba triste, logré que me mostrara su rostro.

Ay Jesús, está vuelta caca.

Inició su relato.

Pero antes de eso, saqué de mi bolsillo un pañuelo, se lo di y este me vio desconfiado, le sonreí de oreja a oreja y este logró sonreír un poquito, usó mi pañuelo.

— Como decía, lo conocí en mi anterior y único trabajo que he tenido —ya logró calmar sus lágrimas— estaba en la etapa en la que creía que todo era rosa y con brillos. Es más, ese día en el colegio se había hablado sobre los alfas, los predestinados y esas weas de omegas enamoradizos, tal vez esa conversación haya hecho que me fijara en Dorian ese día.

Se detuvo, me vió y sonrío negando con su cabeza.

— O tal vez no, cuando ví a Dorian sentado mi pecho sintió una opresión, mis orejas se sentían calientes pero tenía que ser profesional y brindar mi atención al cliente —Cheiz pasa su mano por su nariz— "Vainilla" se volvió mi favorita, en todo. Cada que sentía su olor, acomodaba mi uniforme, mi cabello, me veía frente al espejo de la sala de descanso, y salía sonriente a atenderlo.

Ugly [Omegaverse] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora