-XXII-

22 3 0
                                    

XXII-Veintidós-Decaída

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

XXII-Veintidós-Decaída

Canción:  Que tienes tú-Dvicio ft. Jesús, Reik, Mau y Ricky

Estaba recostada en mi cama, era sábado, no quería salir, hacia bastante tiempo que había despertado, solamente que decidí cerrar los ojos, quería olvidarme de él, se me hacía imposible, Matteo rondaba mis pensamientos, había un nudo en mi garganta y mi estomago, no había manera de que esa horrible sensación se esfumara de mi interior.

Loreana quiso venir a pasar su fin de semana conmigo. Ella quería que me olvidara de las palabras de Matteo. Pero por ahora, me encontraba sola en mi apartamento,  sentí que nadie se interesaba por mí, escuché el timbre, con pereza me removí de mi cama, caminé lentamente y me encontré de lleno con mi amiga, me envolvió en un fuerte abrazo, lloré en el hueco de su cuello, siempre era lo mismo, ella me envolvía en un cálido abrazo y dejaba salir mis sentimientos, por eso la amaba a ella, no me juzgaba, solamente me ayudaba a ser mejor persona, eso si es una verdadera amiga.

-Lucy, tienes que tratar de olvidarte de él. Si tienes que ser madre soltera, lo serás. Solo te pido no sigas llorando, te estás hundiendo tú misma, eso le hace un daño enorme al bebé.-Dijo Loreana, besando mi frente.

-Me niego, se que lo tengo que olvidar y que... será difícil. -Susurré sollozando en sus brazos.

-Basta de llorar, vamos a salir.-Dijo autoritaria, me mandó a ducharme, al salir limpia con olor a manzanilla, me indicó colocarme un outfit que ella me eligió, constaba de: una camiseta básica roja de Pull & Bear, un pantalón de mezclilla oscuro de H&M, unas zapatillas negras brillantes y un par de accesorios que hacían una mezcla de contrastes bien definidos, ella si que sabía. 

Me maquilló y peinó mi cabello con cariño, parecía mi segunda mamá, seguidamente me trasladé con mi amiga Solamente iba sentada en el asiento de acompañante, mi amiga trajo a mis sobrinos junto a nosotras, me tocaba cuidarlos, los abuelos y sus padres estaban de viaje, ellos iban en sus silletas felices cantando y bailando las canciones del Cd de Barney educativo, no sabía a dónde nos llevaría mi amiga, ella era muy creativa, más cuando se trataba de entretener a alguien.

Bajamos del auto, los niños se emocionaron al bajar y ver el parque ante ellos, estábamos en un parque de atracciones

-Chía, un parque-Dijo mi pequeña sobrina mayor con extrema felicidad.

-Sí, mi princesa. Es un parque-Dije tomándola en mis brazos, porque estaba muy feliz y correría de la euforia.

Entramos en el parque, mi amiga me ayudo a organizar un picnic, preparamos las comidas en casa, mis sobrinos estaban conmigo el fin de semana, porque mis padres tuvieron que viajar, mi hermano estaba en un viaje personal con su esposa, en mi mente solo se formulaban escenas de sexo en un hotel, no era por ser entrometida, solamente que él era muy pervertido, seguramente le estaría haciendo miles de cosas a mi cuñada, los niños estaban felices, lo que me hacía alegrarme un poco más, dejar mi orgullo y jugar con ellos, como si no hubiese mañana, ni fuese una adulta.

-Chía, baño-Dijo mi pequeño niño hermoso, anunciando que quería ir al baño. Corrí con él rápidamente al baño de mujeres, hizo sus necesidades, algunas niñas en el baño, lo miraron extraño, no podía entrar a un baño de hombres, solo porque mi sobrino era niño, no sabía ir solo, de inmediato escuche un comentario de mujeres celosas.

-Esa mujer, no enseña a su hijo a ir bien al baño- Dijo una señora. Me molestaba que criticaran la manera de criar, eran solo unos niños, un niño que sabe ir al baño, sería bastante desagradable entrar al baño de los hombres, solamente por mi sobrino.

-Chía quiero agua- Dijo mi sobrino suplicante, jalando mi pantalón. Lo cargué haciéndole cosquillas, para hacerlo reír un poco, su risa era música para mis oídos.

Con unos niños dormidos en sus asientos, estábamos regresando a casa, mi celular estaba descargado, estábamos estancadas en la vía, había un accidente de una camión atravesada, no avanzaba ningún auto, si los niños estuviesen despiertos, moriría por no poder calmarlos en un atasco en la vía.

Después de una hora de completo estrés en la vía, logró avanzar la cola de espera en la vía, Loreana compró comida en un establecimiento y jugamos con los niños, antes de volver al apartamento, nos reímos y cantamos canciones infantiles en el camino a casa. 

Regresé con los pequeños totalmente despiertos, parecía que una siesta de casi dos horas, los hacía recuperar mucha energía. Les preparé un baño calentito, los dejé que jugaran y corrieran por casa, todo lo que quisieran, para que así se me hiciera más fácil dormirles en la noche. Loreana se quedó a jugar con ellos, los entretuvo mientras preparaba el baño con agua caliente, tener dos sobrinos a la vez, un par, mellizos, como lo eran ellos, resultaba cansado, porque ambos teniendo la misma edad, causaban doble problemas, aunque a veces ambos eran un amor con su tita. 

Una vez los dos niños dormidos, besé sus cabezas y salí de la habitación con los dos biberones vacíos, los dejé en el fregadero y acompañé a mi amiga a la puerta de entrada y salida de la casa. 

-¿Segura que podrás dormir?-Preguntó Loreana con preocupación, la conocía muy bien y sabía que no le gustaba verme en ese estado. Asentí, ella besó mi frente y se marchó. Me recosté en mi bañera caliente con aromas a frutas, necesitaba relajarme y nada mejor que un baño caliente, tomar una taza de chocolate caliente y a descansar como Dios manda.  Experimenté un bonito día al lado de una gran amiga y dos criaturas pequeñas que se robaron mi corazón cuando las vi en aquellas cunas de hospital, mis dos bolitas de amor. 

~¿Que opinas de ésta novela?~


Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Amor Efímero-2-Where stories live. Discover now