25. La advertencia.

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Fred y Scarlett llegaron a la gárgola que daba entrada a la oficina de la directora McGonagall. Fred murmuró "Dumbledore", cómo ya había hecho unas veces ese año y la gárgola se abrió. Ambos chicos subieron y golpearon la puerta. La directora murmuró un "adelante" y ellos pasaron. McGonagall se encontraba detrás del escritorio, leyendo un pergamino. Cuando Scarlett cerró la puerta, ella levantó la mirada. Alzó una ceja y abrió la boca.

—Señor Weasley, señorita Sinclair, ustedes deberían estar en sus habitaciones. -dijo ella, severamente, alzando una ceja-. ¿Qué hacen fuera de la cama a esta hora?

—Lo siento, profesora. -dijo Fred, acercándose a donde se encontraba McGonagall-. Es que hay una emergencia. Tiene que avisarle a mis tíos que creemos que ellos en jóvenes han caído en una trampa. -explicó el chico-. James y Julienne fueron a la sala de Menesteres, creemos que Delphi les ha puesto una trampa... Y creemos que Dominique, mi prima, está involucrada... Profesora...

—Debo admitir que me han sorprendido. -dijo Minerva, interrumpiéndolo-. Tu tío, Harry, nunca tenía tiempo de avisar que algo sucedía, se metía en problemas por si sólo y nunca pedía ayuda. -le contó-. Pero no se preocupen, ahora enviaré un aviso a los adultos.

—Si... -dijo Scarlett-. James nos ha dicho que vengamos a avisarle, profesora. Dijo que él, junto con Julienne, vería que estaba sucediendo, están preparados, con sus varitas y la capa de James...

— ¡Dejen de hablar! -las interrumpió Fred-. Profesora, lo lamento, pero es urgente que llame a mis tíos... por favor.

McGonagall lo observó, y asintió con la cabeza. Escribió algo en dos papeles y con un movimiento de su varita, estos desaparecieron.

***

Mientras tanto, en la casa de los Potter.

Harry Potter y Ginny Weasley se hallaban en la cocina de su casa, junto con Ron Weasley y Hermione Granger. Luego de la confesión de la pelirroja, se solían juntar y quedarse hasta tarde, intentado hacer que ella descubra lo que le había borrado de la mente. Dos cartas aparecieron frente a ellos. Harry arrugó el ceño y abrió una.

Harry:

Lamento molestarte a estas horas de la noche. Fred Weasley ha venido a mi oficina, junto con Scarlett Sinclair a avisarme que creían que sus versiones más jóvenes han sido llevadas a una trampa, en la que creen que ha participado Dominique. Me has pedido que les avise si algo así surgía en el colegio, así que por favor, vengan. Ellos creen que están en la sala de Menesteres.

También me han dicho que James y Julienne se han dirigido allí, mientras que ellos me venían a comunicar esto.

Los espero,

Minerva McGonagall,

Directora del colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.

Harry miró a sus mejores amigos y a su esposa. Su hijo había hecho todo lo que le había pedido, excepto no meterse en peleas como esa. Pero él sabía a la perfección que a su edad él hubiera hecho lo mismo. Tenían que volver a Hogwarts, una vez más, para ayudar a su hijo y atrapar a Delphini Riddle, de nuevo.

— ¿Entonces? -dijo él-. ¿Qué estamos esperando? Vamos a Hogwarts.

Los otros tres asintieron, y se fueron a buscar rápidamente sus cosas. Tenían que llegar a Hogwarts, lo antes posible. Antes de que alguien salga lastimado.

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Capítulo editado el día 07/03/2019.

Harry Potter y la travesía hacia el futuro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora