Ojos de vampiro [Gay]

Capítulo 1: León

El reloj de pulsera marcaba las 19:30 horas. Hacía apenas 30 minutos que León estaba en su clase de Licenciatura en Ciencias Biológicas. Le gustaba el turno vespertino y además estaba buscando algún trabajo durante el día. Con cuidado le quitó el envoltorio a un caramelo de naranja y cuando el profesor Iturbide volteó para seguir escribiendo en el pizarrón, se lo metió a la boca procurando que nadie lo viera.

Era su segunda semana en la Universidad Nacional de Mar del Plata, y como el joven es bastante tímido, todavía se sentía incómodo, y aún no había entablado una conversación con ninguno de sus compañeros. Pero tampoco lo intentaba, ya que se sentaba en el fondo del salón, junto a la ventana que daba a la calle para pasar lo más desapercibido posible.

León tenía el cabello rubio, algo rizado y cuando los rayos del sol chocaban en él, parecía dorado. Sus ojos eran color miel. Su mirada misteriosa y apagada, aunque hermosa a la vez. Difícilmente se podía saber qué era lo que estaba sintiendo o pensando. Era muy atractivo; sin embargo, pocas personas notaban eso, debido a su rara personalidad, era bastante antisocial. Le gustaba vestirse con camisetas negras o blancas, justas al cuerpo, pantalones de jean y zapatos.

Acababa de terminar de copiar lo que el profesor había dictado. Miró su reloj de pulsera que marcaba las 20:30 horas. Empezó a observar la puerta, algo nervioso, haciendo garabatos en su cuaderno. Parecía que esperaba a algo, o alguien. De hecho, eso hacía. León sabía que una hora y media después de comenzar la clase, llegaba Christopher. Ese chico tan extraño y misterioso, que llamaba tanto la atención de todo el curso, y en especial, la de León. Poseía el cabello negrísimo, como turmalina, que hacía contraste con su piel más blanca y pálida que una hoja de papel. Sus peculiares y verdaderamente hermosos ojos, tenían los iris de un intenso color violeta. Sus labios eran finos y su tez hacía que éstos pareciesen estar pintados de rojo. Con una media sonrisa, entraba al aula mostrando simpatía y se sentaba un lugar delante de León. Una vez en su asiento, siempre volteaba para saludarlo con un gesto amistoso. Esto hacía poner nervioso al rubio, aunque ni él entendía por qué.

Nota de autor: Hola a todos. Esta es la primer novela que escribo. Espero que les vaya gustando. Pronto voy a subir el siguiente capítulo. Por favor déjenme su opinón, es muy importante para mí :) Si les gusta la historia vótenla, me haría feliz saber que vale la pena seguir escribiendo. Sé que este primer capítulo es muy corto. Los siguientes serán más largos. Un beso a todos ^^