Homofóbica ⊹ Jensoo | #3 [ Saga Homofóbica ]

O55 | ¿Cuál novia?

Jennie abrió su casillero para sacar sus libros de él. Era hora del receso y esperaba ver a Jisoo por allí para acosarla cómo era de costumbre, pero desde hace unos días no la había visto, tal pareciese cómo si la estuviera evadiendo.

Ahí va de nuevo esa opresión en él pecho en pensar en aquellas posibilidades en que Jisoo no quisiera verla.

─¿No te causo problemas, Jennie? ─preguntaba Yoojung algo cabizbaja mientras caminaba al lado de la morena.

─¿Por qué lo dices? ─Jennie se extraño de esa pregunta.

─Y-Yo temo estar incomodando con mi presencia ─No quería ser una molestia, ya llevaba cargando un gran historial por haberse declarado se otra chica en secundaria, algo que venía arrastrando hasta la universidad.

Jennie negó, no era ningún problema la presencia de su nueva amiga, al contrario, era bonito hacer nuevos amigos y no estar sola porque tus amigos se fueron a besar con sus parejas y no volvían.

Ojalá así le tratará la suerte, pero era imposible.

─No eres un problema, Yoojung ─contestó sonriente Jennie. Su nueva amiga nunca sería un problema.

Yoojung observó a Jennie con admiración. La chica demostraba seguridad consigo misma, valiente y sonriente, algo que le hacía falta a ella en muchos aspectos.

─Es que Jennie, parece que no le caigo bien a tu novia ─Murmuró insegura la bajita ─. Me ha estado mirando mal cada vez que estoy cerca de ti y tengo miedo.

Jennie se quedo confundida, es decir, ella no contaba con ninguna pareja. Ni en sus sueños podía tener a Jisoo, o bueno, tal vez sí.

─¿Cuál novia? ─pregunto confundida la morena sacando sus libros de su casillero. No tenía pareja ─. Yo no tengo una, Yoojung.

Yoojung hizo un puchero, ¿Pero esa unnie que estaba a unos metros no contaba?  Porque esa mujer elegante le miraba feo en cada momento que la veía y ya estaba empezando a sentir miedo. Parecía odiarla y ni siquiera le había hablado, tal vez era que le gustaba mucho Jennie y su presencia tal vez la tomaba como amenaza.

─Hablo de ella, no se si la conozcas ─Señalo disimuladamente a la presidenta estudiantil que caminaba por los pasillos con una expresión fría.

Jennie observó impresionada a su amiga, sus mejillas enseguida se encendieron de un color rojizo.

¿Era sólo ella o uniforme de Jisoo esta vez estaba más apretado? Resaltaba bien sus atributos.

─¿Hablabas de Jisoo unnie? ─preguntó desviando la mirada antes de que llegarán esos pensamientos malos, ya quisiera que Jisoo fuese su novia. Era algo que llevaba anhelando desde muchísimos años atrás ─. Ella no es mi novia, es la presienta estudiantil. Me ha gustado desde hace mucho tiempo, pero ─Hizo una breve pausa ─, he sido víctima de fracasos, vaya que vergüenza decir esto en voz alta.

Yoojung se arrepintió de preguntar eso. Había cometido un error.

— O-oh, l-lo siento por preguntar algo personal. —  se apresuró en arreglar su e error, no debía tomar tanta confianza en donde no la había.

Jennie negó con una sonrisa en si rostro.

— Descuida, no es problema. — Trató de animarla, ya que el rostro de la más bajita había decaído. — Ella es muy especial para mi, no tienes porque asustarte.

Unas chicas pasaron al lado de ambas chicas, Yoojung las observó con terror. Reconocía aquella figura en donde fuera.

Trató de ocultar su rostro con su mochila. No quería que la vieran.

— ¿Yoojung estás bien? — preguntó Jennie preocupada.

Una vez que se fueron, Yoojung asintió, quitando la mochila que cubría su rostro. Pero parecía que esas chicas comenzaron a susurrar algo y estaban por darse la vuelta. Se alarmó.

─N-No te preocupes, mejor háblame de Jisoo ─Yoojung tomo la mano de Jennie. Trató de encaminar a la morena hacía los salones.

─C-Claro, tengo mucho que contarte.

Jennie lo dejo pasar, pero sabía que ahí había algo.

Aunque ambas chicas no se habían dado cuenta que dos pares de ojos miraron en su dirección.

Una se trataba de Jisoo, quien estaba celosa a más no poder, cosa que le costaba admitir, ¿Porque Jennie coqueteaba con esa si se supone que gustaba de ella?

Y de otra, la cual se trataba de una chica alta quien observaba aquel rostro tan familiar con asco.